Vitoria - El litigio por la competencia de la línea de bus que conecta Vitoria-Bilbao y Murgia acaba de atravesar una nueva etapa. O más bien lo que ha hecho es hacer una parada, puesto que la Diputación de Bizkaia ha decidido suspender el plazo de presentación de ofertas para el contrato de la línea entre ambas capitales hasta que el contencioso que mantiene con su homóloga alavesa se resuelva en los tribunales. Así lo anuncia una orden foral desde Bizkaia aprobada este mismo miércoles, justo un día después de que el gabinete alavés de Ramiro González presentara formalmente un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) para hacerse con la gestión de esta ruta, largamente reivindicada en tiempos recientes por el ejecutivo alavés.

Pese al hecho de paralizar su licitación, los numerosos usuarios que cada día se suben a esta ruta, una de las más rentables que recorren el territorio, y que actualmente presta la empresa La Unión, no se verán para nada afectados por esta decisión, tal y como explican fuentes forales.

La Diputación alavesa, a propuesta del área de Infraestructuras y Movilidad, mediante la interposición de este recurso volvía a reclamar que se trata “en ambos casos de líneas de su competencia”. Y es que, como argumentan fuentes forales, pese a que desde los años 50 la concesión de esta línea corre a cargo de la Diputación vizcaína, dado que en esa época, la ruta pasaba por el puerto de Barázar, actualmente son más los kilómetros los que transcurren por tierras alavesas.

En concreto, según los cálculos de la Diputación alavesa, contrastados con estudios topográficos, la diferencia oscila entre los seis y los ocho kilómetros en función del sentido. “Tenemos razones jurídicas para reclamar la competencia, ya que la legislación sobre la materia es clara y los recorridos de las líneas también”. Y esto es, precisamente, lo que alega la disposición legal recogida en varias normas, entre las que destaca la Ley 4/2004 de Transporte de Viajeros por carretera del País Vasco, en cuyo artículo 4.2., relativo al régimen competencial, dispone que una línea que atraviese varios territorios de Euskadi, será potestad de la Diputación Foral del territorio por el que pase la mayor parte del kilometraje.

Pero como en más de una ocasión ha resaltado el titular foral de Infraestructuras y Transportes, Josu López Ubierna, “tenemos además razones de interés ciudadano: la gestión de estas líneas nos permitirá adecuarnos más y mejor a las demandas de los alaveses”. Según enfatiza López Ubierna, los objetivos también son “mejorar los servicios y dotar a Álava de nuevas herramientas para su desarrollo económico y turístico”. La conexión directa con los aeródromos es el mejor ejemplo de ello.

Este martes. El pasado día 17, el gabinete de Ramiro González presentó formalmente un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) para hacerse con la gestión de esta ruta, largamente reivindicada en tiempos recientes por el ejecutivo alavés.

Este miércoles. Un día después de que Álava interpusiera este recurso, la Diputación de Bizkaia aprobó este miércoles en una norma foral suspender el plazo de presentación de ofertas.