GASTEIZ - Los principales partidos políticos con peso en Álava y sindicatos como ELA se mostraron ayer expectantes ante el escenario abierto tras la confirmación del cierre de Garoña, un proceso que “ni siquiera ha comenzado” a juicio del coportavoz de Equo, Juantxo López de Uralde, que compareció en Gasteiz junto a la portavoz de la formación ecologista en el territorio, Erika Martínez. El también diputado de Unidos Podemos por Álava solicitó un plan que derive en el cierre planificado de todas las centrales del parque estatal, dado que la clausura de Garoña vuelve a “abrir el debate sobre la transición energética”. López de Uralde, de hecho, vaticinó que con Garoña “comienza el principio del fin de las nucleares” en el Estado.

Por su parte, la presidenta del PSE-EE en Álava, Cristina González, pidió al Gobierno central un plan de reindustrialización y de apoyo al empleo para la comarca que acoge el reactor en declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Europa Press, así como su desmantelamiento. Entretanto, el presidente del PP alavés, Iñaki Oyarzábal, lanzó esta misma pelota a las instituciones vascas, a las que instó a “tomar medidas” en los municipios alaveses afectados en una entrevista a Onda Vasca.

Además, EH Bildu ha presentado sendas mociones en el Ayuntamiento de Gasteiz y las Juntas Generales de Álava en las que solicita el desmantelamiento inmediato de la central, un proceso que “no se puede prolongar en el tiempo”. El sindicato ELA, por último, enfatizó que “la lucha contra la energía nuclear no ha terminado”. - C.M.O.