elvillar - La bodega de David Sampedro y Melanie Hickman, Bhilar, situada en el camino a Lantziego, en Elvillar, se encuentra en una fase muy avanzada de construcción y aunque ya disponía de la autorización provisional para la modificación que se ha tenido que gestionar en el Plan General de Ordenación Urbana, esta semana se ha publicado el permiso definitivo.
La iniciativa del joven bodeguero se desarrolla sobre una superficie global de 16.280 metros cuadrados aunque la parcela receptora quedará en 15.656 metros, ya que la normativa obliga a descontar el tramo del viario público, de 624 metros cuadrados, situado al frente de las parcelas.
En esta demarcación se está desarrollando una bodega destinada a la elaboración, almacenamiento, crianza y embotellado de vinos amparados por la Denominación de Origen Calificada (DOC) Rioja, incluyéndose las actividades complementarias de la explotación, repartidos en otros edificios que son los que se está construyendo en estos momentos.
Para su construcción, el bodeguero ha tenido que solventar numerosas cuestiones medioambientales y paisajísticas, ya que el ámbito de actuación se encuentra afectado por la delimitación de los asentamientos de Paulejas y Las Naves, incluidos como Zona de Presunción Arqueológica en el Decreto 89/2014, de 3 de junio del Gobierno Vasco, por el que se califica como Bien Cultural, con la categoría de Conjunto Monumental, el paisaje Cultural del Vino y del Viñedo de la Rioja Alavesa.
Existe además un chozo identificado en el Catálogo de Elementos Menores del Servicio de Patrimonio-Histórico de la Diputación Foral de Álava con el código ELV-100, por lo que durante el desarrollo de construcciones y posterior actividad se prohiben las afecciones al mismo, estando permitidas únicamente aquellas actuaciones encaminadas a su adecuada conservación y mantenimiento. Por ello se ha establecido un área de protección de dos metros alrededor de las muros externos del mismo, de tal forma que se garantice el carácter de elemento aislado en el paisaje, eliminando el riesgo de elementos anejos o cercanos que puedan desfigurar su naturaleza.
David Sampedro es enólogo y viticultor y su actividad comenzó en varias grandes bodegas de La Rioja, Navarra y Salamanca hasta que decidió desarrollar sus proyectos personales basados en la ecología y la biodinámica a través de una bodega de alquiler, donde puso nombre propio a sus vinos Phincas. En 2012 inició las gestiones para construir su propia bodega a la que ha dado el nombre de Bhilar, en homenaje a su pueblo de nacimiento, ya que es Elvillar en euskera.
En sus viñedos trabaja con el sistema tradicional de caballería, ya que ha desterrado el tractor de sus tierras. - P.J.P. / Foto: P.J.P.