Vitoria. Esta es una de las novedades incluidas en el plan que estará vigente hasta 2020 y que hoy ha dado a conocer en rueda de prensa la directora de Gabinete del Diputado General, Nekane Zeberio.Tras un año de elaboración, en la que han participado "más de 200 personas", este documento fija "el marco programático" de las políticas forales en materia de igualdad durante los próximos cuatro años.

El plan, que consta de cuatro ejes estratégicos de actuación y 80 medidas concretas, cuenta con una financiación para 2017 de "en torno a un millón de euros".

Zeberio ha asegurado que una de las características del plan es "lograr que el género sea transversal" en todas las políticas públicas para "contribuir así a la igualdad".

El primer eje del documento se refiere al buen gobierno y en él se incluyen medidas como las cláusulas de igualdad "en las contrataciones, subvenciones y convenios".

A este respecto Nekane Zeberio ha explicado que "no se trata de aplicar cláusulas-tipo en todos los casos pero sí de ir incorporándolas progresivamente".

Las cláusulas de igualdad en los contratos ya se incluyeron en una norma foral de 2015 (con el PP en el gobierno de la Diputación) aunque esta medida fue suspendida posteriormente por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.

De ahí que ahora el esfuerzo se dirija a los convenios y las subvenciones.

En este mismo apartado, el plan prevé fomentar la participación de las mujeres en los concejos y juntas administrativas así como la creación de una red de personal técnico especializado en igualdad del territorio.

El segundo eje establece el empoderamiento de las mujeres y en él se incluyen medidas como la ampliación del proyecto formativo para mujeres LAIA Eskola, la intensificación del Consejo Foral de Igualdad y la realización de estudios sobre la imagen estereotipada de las mujeres en los medios de comunicación.

En tercer lugar se sitúan las medidas para hacer frente a la violencia machista, "una preocupación central" de la Diputación alavesa.

Se contempla, en este caso, la realización de diagnósticos de violencia por cuadrillas y la mejora de los protocolos locales de actuación.

Por último, el cuarto eje del plan se refiere a la nueva cultura y organización de los cuidados, que ahora "recaen especialmente sobre las mujeres".

Aquí se detallan acciones como la realización de un estudio sobre las condiciones en que se realizan esos cuidados y el reconocimiento a empresas que se corresponsabilicen con los cuidados facilitando medidas de conciliación a sus trabajadores.