gasteiz - A Tuvisa se le acaba el tiempo. Urge un acuerdo político y los concejales tienen hoy sobre la mesa la encomienda de ponerse de acuerdo para que la ciudad compre diez autobuses nuevos. Una decisión a priori sencilla pero que se ha complicado por las discrepancias de los partidos a la hora de definir cómo se van a pagar los nuevos autocares que vienen a renovar una pequeña parte de los ochenta vehículos que cubren las líneas de transporte público de la ciudad; una flota demasiado vieja para prestar un servicio de calidad a los ciudadanos, como denuncian chóferes y usuarios.

El alcalde ya ha manifestado su confianza en que en el consejo extraordinario de hoy se encauce y desbloquee la situación. Así que el concejal responsable del área, Borja Belandia, volverá a poner sobre la mesa la propuesta del gobierno jeltzale. Un planteamiento que va más allá de la compra de diez autobuses, ya que también es preciso renovar las cocheras que sirven para guardar los urbanos. Al igual que la flota, las instalaciones de Agirrelanda están viejas y no se ajustan a las necesidades de transporte de una ciudad que quiere incorporar a su sistema público los autobuses exprés o BRT. “Tuvisa debe tomar hoy varias decisiones estratégicas. Por eso presentamos una propuesta en la que queda reflejada la renovación progresiva de la flota de autobuses, que se abordará de manera estructural mediante la compra de cinco autobuses al año, de forma que la edad media de cada unidad no supere los catorce años”, señala Belandia.

Atendiendo a la propuesta del gabinete Urtaran, otro de los aspectos a tener en cuenta a la hora de comprar nuevos autobuses es la reducción de emisiones contaminantes. En cada legislatura se aprobará un programa de renovación de los cuatro años, concretando las propuestas, combustible, tamaños de los vehículos etcétera. Según esta hoja de ruta, durante este mandato llegarán nuevos autobuses en dos tandas: una primera con diez autocares articulados (de los grandes) y diesel, cuya recepción se prevé para finales de febrero o principios de marzo del próximo año. Y una segunda entrega de otros diez vehículos, que se aprobará más adelante.

El ejecutivo del PNV propone adquirir estos diez primeros buses mediante la fórmula del préstamo a diez años, para lo que la amortización de ese préstamo deberá estar autorizada por el Pleno antes de licitar el contrato. Tuvisa calcula que la amortización ascenderá a 350.000 o 420.000 euros al año, incluido el precio del autobús y los intereses del préstamo. Igualmente es partidario de subir el precio del billete a los usuarios, aunque para eso deberá convencer a otros partidos que hasta ahora se oponen a que caiga en los ciudadanos el peso de la mala situación económica que arrastra la sociedad Tuvisa.

Con autobuses de catorce años y cocheras de cincuenta todos están de acuerdo en que hay que comprar. El problema es que la sociedad no tiene fondos para pagar ni nuevos coches ni instalaciones, así que de lo que hoy se trata es de concretar la fórmula de pago. Además de la del gobierno, que aboga también por subir el precio del billete, hay otras propuestas sobre la mesa, como la de Irabazi, partido que plantea tomar la recaudación de la OTA para inyectar dinero a Tuvisa o cobrar un canon a los autocares interurbanos que hacen paradas en Vitoria, punto este último que no convence al gobierno. La Corporación también aboga por combustibles menos contaminantes que el diesel, pero habrá que posponerlo a próximas compras ya que de momento los técnicos apuntan que los eléctricos que hay en el mercado no están preparados para ofrecer un servicio como el que Gasteiz precisa debido, sobre todo, a la poca durabilidad de la carga de la batería.

Los últimos urbanos que llegaron a Gasteiz fueron los 18 vehículos adquiridos hace ya nueve años. Desde entonces, estos autobuses están en circulación entre 16 y 18 horas al día.

Autobuses. El gabinete Urtaran planteará de nuevo hoy comprar veinte autobuses esta legislatura en dos fases. Los diez primeros serán articulados, esto es, de los dobles, diesel y llegarán a Vitoria en febrero o marzo del próximo año. Los otros diez se dejan para final de legislatura.

Forma de pago. El PNV propone adquirir estos diez primeros autobuses mediante la fórmula del préstamo a diez años. Tuvisa calcula que la amortización ascenderá a 350.000 o 420.000 euros al año, incluido el precio del autobús y los intereses del préstamo.

Cocheras. El gobierno municipal plantea también habilitar nuevas cocheras, ya que las instalaciones de Agirrelanda tienen cincuenta años y no están preparadas para la llegada de nuevos modelos de transporte como el BRT. Aboga por ubicar la zona de garajes en dos áreas, una para autobuses tradicionales y eléctricos y otra para oficinas. Su coste, de ocho a doce millones.

Precio del billete. El Ayuntamiento tiene que decidir si sube el precio del billete.