Gasteiz - En el Ayuntamiento de Vitoria no se realiza una planificación adecuada de la concesión de subvenciones, y tampoco de la contratación externa, y por ello se acaba trabajando “sobre la marcha”, sin la adecuada concurrencia y muchas veces pagando demasiado tarde a los beneficiarios de ayudas. Así lo manifestó ayer el interventor municipal gasteiztarra, Alfredo Barrio, en la presentación de su informe general correspondiente al año 2015 en el caso del Ayuntamiento y de 2014 en el de las sociedades municipales.

Nada que no se sepa ya, en todo caso. Los desajustes de la institución a la hora planificar su día a día son notorios, y de hecho Barrio explicó que los reparos documentados en 2015 van “en la tónica de años anteriores”. Así, el funcionario reclamó que se elabore un “plan estratégico de subvenciones”, pues “cada vez hay más sentencias de nulidad”; y una “mayor planificación” a la hora de contratar.

El concejal de Hacienda, Borja Belandia, recogió las sugerencias del interventor y aseguró que el equipo de gobierno está trabajando para mejorar la política de convocatoria de contratos y subvenciones, y además señaló que se trasladará también esta inquietud a los consejos de administración de las sociedades públicas; Gilsa, Amvisa, Tuvisa y Ensanche 21.

El informe de Barrio generó además una confrontación de pareceres, o más bien una bronca en toda regla, entre el PP y EH Bildu. El concejal de la formación soberanista Antxon Belakortu aseguró que el texto del interventor ratifica las denuncias de su grupo, pues según dijo pone de manifiesto cómo en Ensanche 21 se contabilizaban en 2014 ingresos ya registrados anteriormente con el fin de presentar beneficios a fin de año, “y luego cuando se abrió la lata estaba podrida”. Se refería Belakortu al préstamo de veinte millones de euros que ha tenido que pedir la sociedad para poder reinventarse y modificar sus estatutos. Belakortu señaló además que, según el informe, Tuvisa compró neumáticos sin convocar el correspondiente concurso, y que sacar dinero de Amvisa, como propuso hacer el PP, ponía en peligro a esta sociedad. En definitiva, según el edil de EH Bildu, el interventor señala que “imputan gasto corriente como inversiones para trampear la liquidación y decir que no teníamos déficit”. En cuanto a las subvenciones, Belakortu denunció que el actual calendario de cobro de los impuestos impide pagar las ayudas en un plazo razonable.

Lógicamente, el anterior concejal de Hacienda y actual edil del PP Manu Uriarte tenía otra lectura de lo manifestado por el fiscalizador de las cuentas municipales. “Es un informe muy completo que audita las cuentas de Ayuntamiento todos los días. ¿Y qué vemos? Que Ensanche 21 tiene 6,3 millones de euros de beneficios, y Amvisa 5,1 millones”, señaló Uriarte, quien afirmó que la petición del préstamo de veinte millones responde a “necesidades de tesorería”, pero en ningún caso a estrecheces financieras. Uriarte afirmó además que el actual Presupuesto para 2016 contempla “exactamente la misma estructura de gasto que antes”, y cuenta con el respaldo de EH Bildu.

Las advertencias del interventor sobre la gestión económico financiera de la institución vienen de varias legislaturas atrás, pues el volumen de gasto corriente y la capacidad de ingresar del Ayuntamiento vitoriano están tan ajustados que en muchas ocasiones las tensiones de tesorería son notables. O dicho de otra manera, en el Consistorio gasteiztarra es muy habitual llegar a fin de mes con lo justo en la cuenta corriente. Uno de los compromisos del actual equipo de gobierno es acometer una reforma estructural en la gestión económica para acabar con este problema, ahora que, además, por Ley, las entidades locales no pueden endeudarse con tanta ligereza como lo hacían en el pasado.

Subvenciones. El interventor afirma que es necesario implementar en el Ayuntamiento vitoriano un “plan estratégico de subvenciones” ante las sentencias de nulidad que van llegando a la institución.

Contratos. En materia de contratación, el fiscalizador de la actividad municipal pide una mayor planificación para poder convocar procedimientos más abiertos.

Sociedades públicas. Si bien el informe del interventor con respecto al Ayuntamiento fiscaliza la actividad de 2015, en relación a las sociedades públicas su análisis se ciñe al ejercicio anterior.

Acuerdo presupuestario. El pacto sobre las Cuentas para 2016 establece que todas las subvenciones nominativas han de contar con el visto bueno del Pleno municipal.

El interventor reclama a los responsables de la institución que mejoren la planificación de las contrataciones que se realizan.

El concejal de Hacienda aseguró que el equipo de gobierno trabaja para desarrollar una mejor gestión de los contratos y subvenciones municipales.