vitoria - La transformación del Palacio Europa exclusivamente en centro de congresos ha dejado a los vecinos del barrio sin centro cívico. Mientras el Ayuntamiento completa la red con la construcción de nuevas instalaciones en Salburua y Zabalgana, los residentes de la Avenida, San Martín y Txagorritxu se han quedado sin sala de encuentro para leer el periódico, biblioteca o zona de juegos para los niños. Una situación que preocupa en el seno de la asociación vecinal Etxegorri, que está recabando información para solicitar al gobierno de Javier Maroto una solución. Lo más cerca que tienen es el polideportivo de San Andrés, que sólo les sirve para la práctica deportiva. Para disfrutar como antes de la biblioteca, hemeroteca etc. tienen que desplazarse a El Pilar y “ya es otro barrio”, dicen.
En el Ayuntamiento les responden que se puede buscar otro local municipal en San Andrés o San Martín, pero les parece insuficiente. No quieren sólo una sala para reuniones sino un espacio que sirva de punto de encuentro para el barrio, como tenían en el Europa antes de la reforma del edificio y la desmantelación del centro cívico, explica Arantzazu Alonso, portavoz del colectivo vecinal. Saben que no se va a construir ningún otro centro cívico porque con los ya existentes y los que van a entrar en funcionamiento el Ayuntamiento da por cerrada la red de instalaciones de proximidad en Vitoria. Aun y todo los ciudadanos que residen en el área de la Avenida quieren lo más parecido a un centro cívico y no se conforman con un local para reuniones. Es la queja que han trasladado a la asociación en sus primeras asambleas. “Preocupa, en el barrio preocupa este asunto porque se han quedado sin un servicio que antes disfrutaban”, indica Alonso. “El Europa era antes un lugar para la reunión de la gente, para estudiar, para que jugaran los niños, con biblioteca?, después de estas obras y con las quejas que ha habido, ¿qué servicios le va a ofrecer el edificio al barrio?”, se preguntan los vecinos.
No es el único tema sobre la mesa de la recién creada asociación vecinal. En las asambleas de Etxegorri cada vez son más los asuntos a tratar: lonjas juveniles, bicicarriles, euskera etc. “Hasta ahora ha acudido más gente de la que esperábamos y de distintas edades”. De momento su principal tarea se centra en recopilar información sobre las preocupaciones que tiene el barrio y en buscar un local adecuado para las reuniones -ahora lo hacen en la parroquia de San Andrés-, aunque el Ayuntamiento ya les ha dejado claro que para conseguir un local tienen que esperar un año, igual que para obtener ayudas económicas.
Además de la desaparición del centro cívico, las lonjas juveniles de Gazalbide se han convertido en otra preocupación en Txagorritxu. La mayoría de los locales del centro comercial están vacíos y reconvertidos en lonjas juveniles. Y aunque de momento no hay problemas graves, los vecinos ya se han quejado por algún comportamiento incívico de los chavales, sobre todo por molestias y ruido en los locales. “Queremos dejar claro que es alguno de los locales, no todos”, matiza Alonso. Aun así, la asociación ha decidido mediar en el asunto y reunirse con todas las partes: vecinos, chavales, propietarios... para encontrar una solución y mejorar la convivencia entre todos los implicados. “Es nuestra prioridad para los meses de marzo y abril”.
Además, entre las ideas recabadas en el barrio, los ciudadanos han propuesto ya otras líneas de actuación en las que se podría trabajar para dinamizar la zona. Entre ellas, colaborar entre los vecinos en el diseño de murales, siguiendo el ejemplo de Zaramaga y del Casco Viejo. También promover el comercio del barrio hablando con los comerciantes para testar su opinión y crear campañas para que sus ofertas o productos especiales se publiciten con llamadas como Txagon bizi, Txagon erosi/Vive en Txago, compra en Txago. El barrio también se ha embarcado en la creación de un grupo de trabajo en torno a la Korrika. Y a más largo plazo, Etxegorri tiene en mente abordar la inmigración y poner un buzón ciudadano a disposición de los vecinos.
aranbide y aranbizkarra Y de Txagorritxu a Aranbide y Aranbizkarra, donde la asociación Zazpigarren Alaba reclama unos planes muy distintos a los que el Ayuntamiento tiene para la vieja estación de Los Herrán que a partir del lunes se convertirá en un espacio vacío. El barrio reclama un centro de jubilados y un local social porque cree que con el traslado de los autobuses a Lakua cambiará la actividad en la zona. Sin embargo, el gobierno de Maroto va a transformar el apeadero en un parque infantil cubierto, una iniciativa que el PP ya llevaba en su programa electoral. Ayer, la concejala Leticia Comerón explicó a los vecinos que acudieron al Ayuntamiento que si lo que demandan para el barrio es un centro de mayores se pueden buscar otras ubicaciones, pero que el proyecto de zona infantil va para adelante.
El Palacio Europa era antes un lugar para la reunión de la gente, para estudiar, para que jugaran los niños, con biblioteca?, después de la reforma, de su transformación en centro exclusivo para congresos, se preguntan los vecinos: ¿qué servicios va a ofrecer ahora el Europa al barrio?
La asociación Etxegorri se ha propuesto mediar entre las partes implicadas: usuarios, propietarios, vecinos... para mejorar la convivencia entre todos a raíz de alguna queja puntual recibida por molestias y ruido de los chavales que se reúnen en estos locales de Gazalbide.
