gasteiz - Cuando el diputado general, Javier de Andrés, retiró su proyecto presupuestario para acudir a la prórroga y evitar defenderlo en las Juntas Generales, toda la oposición se mostró dispuesta a cincelar las Cuentas de 2015 con mejoras y nuevas partidas mediante la introducción de normas forales. Una forma de crear unos Presupuestos alternativos, consensuados entre el resto de grupos políticos ante la soledad del PP en la Cámara foral, con los que evitar así que el territorio quede paralizado en estos cinco meses que restan para el final de legislatura.

Ayer, el portavoz juntero del PNV, Ramiro González, presentó la primera de las normas forales que los jeltzales quieren introducir en los Presupuestos, centrada en el fomento del empleo. Es la primera, pero no la última, y se une a propuestas presentadas también recientemente tanto por el PSE como por EH Bildu. El objetivo de la oposición, como recalcó ayer el candidato del PNV a diputado general, pasa por alcanzar acuerdos conjuntos para impulsar unas Cuentas alternativas para Álava que potencien cuestiones que el Gobierno foral ha dejado en la cuneta con su proyecto. La norma foral puesta sobre la mesa por Ramiro González consiste en la puesta en marcha de una ayuda de tres millones de euros para el fomento del empleo entre los menores de 30 años y los parados de larga duración. “El 58,8% de los parados de Álava está en esta situación, con más de un año sin trabajo, y el 27,4% de los jóvenes de hasta treinta años tampoco encuentra empleo”, advirtió al respecto el portavoz juntero.

La propuesta del PNV pasa por subvencionar a empresas instaladas en Álava que realicen contratos indefinidos, fijos discontinuos o al menos de seis meses de duración a personas residentes en la provincia durante 2015. Los importes máximos subvencionables serían de 90.000 euros por empresa beneficiaria y 15.000 euros por contrato. “Las ayudas oscilarán entre el 30% y 40% del salario bruto por un periodo máximo de un año y el grado de ayuda dependerá de la edad y género de la persona contratada”, subrayó Ramiro González, que explicó que “la retirada de las Cuentas para el año que viene no va a impedir que debatamos sobre Presupuestos y acordemos unas Cuentas alternativas”. “Aunque el PP no quiera, el territorio tendrá unos Presupuestos que cubran las necesidades reales de los alaveses”, resaltó.

Habida cuenta de que EH Bildu y PSE también han presentado ya -y continuarán haciéndolo en las próximas semanas- sus respectivas normas forales en temas que consideran prioritarios, la oposición tendrá que negociar el visto bueno a las distintas propuestas a lo largo de enero para que puedan estar aprobadas en febrero.

El portavoz del PNV en las Juntas Generales adelantó también que las próximas normas que presentarán para ser incluidas en los Presupuestos estarán relacionadas con el impulso del euskera, defenestrado en el proyecto presupuestario popular, la recuperación de partidas económicas para colectivos “abandonados por el PP” o el fomento de las energías renovables en el territorio. “Nuestro objetivo es llegar a acuerdos que permitan que Álava tenga Presupuestos por esta vía frente a la cerrazón del PP”, aseguró el portavoz jeltzale, que también quiso dejar la puerta abierta a que De Andrés se adscriba a alguna de las normas forales para mejorar las Cuentas de 2015, aunque el propio diputado general se encargaba después de cerrarla de un portazo.

Críticas forales De Andrés disparó con bala a todos los grupos de la oposición para enterrar y ningunear sus Presupuestos alternativos, y aseveró que “es poco menos que imposible” que puedan diseñar unas Cuentas a través de este procedimiento porque, según dijo, “no saben”. El diputado general descalificó las iniciativas de toda la oposición porque sus normas forales “carecen de sentido”, pues “obvian partidas y créditos que ya están comprometidos para 2015”. De Andrés apuntó que en el Presupuesto de este año vienen recogidos créditos de compromiso para el próximo ejercicio por un importe de 66 millones de euros y el año que viene existen nuevas obligaciones como el abono a los funcionarios forales de parte de la paga extraordinaria de 2012.

De Andrés valoró que el margen que queda para introducir partidas el próximo año es escaso y ante las propuesta de la oposición para gestionar la prórroga les reprochó que antes de ponerse a calcular “la cuenta de la lechera” deberían saber de qué margen de dinero van a disponer, porque según opinó De con esta forma de actuar sólo se genera “frustración” porque se crean expectativas “sin viabilidad alguna”. Pese a las críticas del diputado general, parece claro que la oposición foral está dispuesta a unir sus fuerzas para sacar adelante distintas normas forales que mejoren las Cuentas y permitan a Álava seguir rodando en este último curso de legislatura.