Vitoria - La transformación de la Plaza de Abastos de Gasteiz sigue quemando etapas con la vista puesta en su esperada reinauguración de comienzos del próximo otoño. El mercado, de hecho, entrará pasado mañana en la fase más crítica de su reforma, una etapa al mismo tiempo imprescindible para acometer, por un lado, la reagrupación de los puestos de sus comerciantes en la planta baja y, por otro, la completa remodelación de sus niveles primero y segundo. Estas dos plantas superiores, donde los comerciantes todavía se ubican, serán cerradas definitivamente este sábado tal y como se han conocido hasta ahora para llevar a cabo su derribo a partir del próximo miércoles 28.

Los clientes de la plaza podrán realizar sus compras normalmente hasta las 15.00 horas, momento en el que los puestos echarán la persiana y los comerciantes iniciarán su vaciado -tendrán de plazo hasta el día de inicio del derribo- para comenzar la mudanza hacia sus nuevas ubicaciones. La gran mayoría se instalará en la planta baja, que será ampliada y contará también con un gastrobar con ocho espacios especializados, aunque unos pocos más se situarán en la futura terraza multiusos que se construirá en la azotea del complejo. Los minoristas locales que se agruparán a cota cero no reabrirán sus persianas "por motivos de seguridad" hasta el próximo 17 de junio, el día en que culminará el derrumbe de las plantas uno y dos, según explicó ayer en declaraciones a este periódico el gerente de la plaza, Eloy López de Foronda. La reapertura de los de la terraza, lógicamente, se retrasará hasta la apertura de este espacio.

A pesar de las molestias que la mudanza causará a los clientes de la plaza, López de Foronda celebra el escaso tiempo en que los comerciantes se verán obligados a cerrar sus puestos. "El mérito es que después de dos años de obras la plaza ha cerrado el mínimo tiempo posible. Este abierto por obras que hemos tenido ha sido un éxito", se felicita el gerente. Otro motivo de alegría para López de Foronda es que a pesar de la perpetua crisis económica y de las obras del complejo sus ventas apenas se han resentido. "Los comerciantes han seguido vendiendo en su línea de siempre", certifica el profesional.

Cuando el 17 de junio haya culminado el derribo de las dos plantas superiores y los puestos hayan reabierto en la planta baja, el mercado arrancará la fase definitiva de su reforma, que se desarrollará en paralelo tanto en el exterior como en el interior. Por un lado, se irá completando la instalación de la cubierta de acero y cristal que envolverá al complejo y que actualmente ya se encuentra construida "en sus tres cuartas partes". Una actuación que se completará también con la reforma de los accesos desde la calle y desde el actual aparcamiento de Santa Bárbara. Por otro, se iniciará la completa remodelación de la planta primera, que será ocupada en su totalidad por El Corte Inglés, y de la segunda, destinada a la terraza multiusos. Los grandes almacenes tienen previsto ubicar en la renovada plaza una planta de moda deportiva y de complementos, que según está previsto se unirá al edificio clásico con una pasarela.

En cuanto a la terraza, que contará con alrededor de diez puestos destinados a la venta de producto local y ecológico, podrá ser empleada para todo tipo de eventos. Contará con una cubierta ajardinada, huertos ecológicos, un aula de enogastronomía y una sala para presentaciones. Además, el proyecto prevé cubrir las grandes cajas de escaleras que llegarán hasta la cubierta con un muro vegetal.

López de Foronda confía en que los plazos manejados por los comerciantes se cumplan y la reforma completa de la plaza esté concluida para finales del próximo mes de septiembre, con lo que la reinauguración oficial del espacio podría llegar "en la primera o segunda semana de octubre". Un largo camino iniciado el pasado diciembre con el estreno del nuevo supermercado BM en el sótano del edificio, donde antes estaban las pescaderías, y la apertura de cuatro nuevas escaleras mecánicas.

Para más adelante, está prevista también una remodelación de toda la manzana de la Plaza de Abastos, para la que ya hay varias propuestas sobre la mesa, la última del grupo municipal del PNV, aunque todavía no se ha tomado una decisión definitiva. La factura del plan para regenerar todo el entorno de Santa Bárbara está estimada en un máximo de 22 millones de euros.

Sótano. Desde el pasado diciembre ocupa este espacio, donde antes estaban las pescaderías, el nuevo supermercado BM.

Planta baja. Los minoristas locales se reagruparán aquí. El sábado inician su traslado, aunque no abrirán hasta el 17 de junio.

Planta primera. Tras su derribo y remodelación, El Corte Inglés la ocupará con una planta de moda deportiva y complementos.

Planta segunda. Se instalará una terraza multiusos y habrá unos diez puestos para la venta de producto local y ecológico.