vitoria - Antes de aprobar la nueva normativa de la bicicleta, por la que los ciclistas tienen que circular por la calzada, junto con los coches, si no tienen carriles-bici, el Ayuntamiento restringió la velocidad de los coches a 30 kilómetros por hora en medio centenar de calles de la ciudad para facilitar la circulación a las bicis y que quitaran el miedo a los vehículos de motor. Aun así, hay vías por las que los ciclistas pedalean temerosos de ser arrollados por un coche. Gasteizko Bizikleteroak acaba de trasladar al Ayuntamiento una nueva petición para transformar en zona 30 dos de estas arterias próximas a colegios en las que han detectado problemas. Son la calle Corazonistas y Helsinki, en Salburua. En el primer caso se trata de una vía de un solo sentido con doble carril en la que, según la ordenanza, la velocidad máxima es de 50 kilómetros pero, se da la circunstancia -apunta el colectivo de ciclistas urbanos- de que hacia la mitad de la calle se ubica la entrada al colegio Sagrado Corazón, con sólo dos pasos de peatones al principio y al final de la calle, a doscientos metros uno de otro. Además, es una calle interior y con un centro escolar, razón por la que "se debería limitar su velocidad a 30", señalan. Por otro lado, en su intersección con Nieves Cano existe un paso de preferencia ciclista "apenas perceptible" para los vehículos que circulan por Corazonistas, ya que no está señalizado verticalmente, y dada la velocidad de los coches se producen continuas situaciones de peligro para los ciclistas, explica Gasteizko Bizikleteroak. Por ello, el colectivo de ciclistas urbanos pide al Ayuntamiento que se convierta esta calle en zona 30, reduciendo la sección de la calzada, bien con un carril contrasentido para bicis, o bien aumentando la banda de aparcamientos colocándolos en batería y marcha atrás, ahora son en línea. También que se instale un gran paso de peatones a la altura de la puerta del centro escolar y se señalice el paso ciclista con señales verticales con luces.
Algo similar ocurre al otro lado de la ciudad, en la calle Helsinki de Salburua. En este punto, el Observatorio de la bicicleta ha detectado que la calle no puede atravesarse entera porque, a pesar de ser de doble carril por sentido, desde su intersección con la calle Londres los sentidos de circulación son opuestos. El problema para los ciclistas reside en que hacia la mitad del tramo más largo (200 metros) hay una escuela infantil y los coches pasan a gran velocidad. "Deberían reducir la velocidad a 30 kilómetros por hora", recomiendan, además de solicitar que se señalice convenientemente la existencia de un centro escolar.
calle postas Otro de los puntos problemáticos para los ciclistas de Bizikleteroak es la calle Postas. En este punto hay una vía contrasentido exclusiva para bicicletas en dirección este-oeste entre las calles Los Herrán y La Paz. Una vía "invadida por los coches con bastante frecuencia y muchas veces por desconocimiento, sobre todo cuando salen del parking subterráneo de la plaza Santa Bárbara.
Por eso, el colectivo reclama al Ayuntamiento una correcta señalización para que los conductores sepan que existe un bidegorri. Una solución podría ser -apuntan- pintar de diferente color la vía ciclista o que la banda de separación de las vías sea sonora.
Por último, el colectivo denuncia la inaccesibilidad a los aparcabicis de la calle Arca por culpa de los contenedores de reciclaje, por lo que pide que los recipientes de la basura se retiren y trasladen a otro lugar. "Sería recomendable delimitar la zona donde se deben colocar los contenedores mediante pintura en el suelo para que los operarios de FCC sepan y no invadan los aparcamiento de las bicis".
También que se repongan los dos módulos para cuatro bicis retirados en la calle Laguardia de Zaramaga, entre los números 6 y 8, que daban servicio tanto a los vecinos como al colegio Mercedarias. Al parecer fue un vecino quien solicitó que se retiraran, pero Bizikleteroak considera que sin razón justificada, por lo que emplaza al ejecutivo de Maroto a que antes de atender una solución particular se asegure de que la solicitud se realiza con una argumentación correcta. El Observatorio de la bicicleta elabora mensualmente informes sobre los puntos negros de los desplazamientos a dos ruedas, que traslada al Ayuntamiento para mejorar la movilidad.