Amurrio. El Ayuntamiento de Amurrio ha decidido poner coto al daño que está ocasionando la humedad en la documentación almacenada en la zona sur del sótano de la Casa Consistorial, destinada a archivo de expedientes de urbanismo, con la instalación de un sistema de climatización que le ha supuesto a las arcas un desembolso de casi 12.400 euros.
Y es que ya hace tres años que se detectaron problemas de conservación, debido a la aparición de moho en gran parte de la documentación, que puso sobre la mesa que las condiciones no eran las aceptables para garantizar la inalterabilidad de lo allí almacenado. Según el informe emitido por el aparejador municipal, "la aparición de moho se debe a la existencia de unos índices de humedad altos en el local, durante períodos de tiempo prolongados. Una cuestión que no se puede controlar, ya que la climatización actual tan solo permite el control sobre la temperatura de la sala".
Control de la temperatura En este sentido, tras buscar diferentes alternativas para solventar el problema, se optó por plantear una solución similar a la existente en el archivo general del Ayuntamiento. Es decir, "instalar un sistema que permita el control tanto de la temperatura como de la humedad del local, que garantice el correcto mantenimiento de la documentación", apuntan.
Tanto la instalación como el suministro del aparato se ha dejado en manos de la empresa Climatización Vasa Servicios Energéticos, ya que a parte de presentar la oferta más económica (12.374,35 euros), se ha tenido en consideración que "fue la firma que instaló todo el sistema de climatización de la reforma del Ayuntamiento, incluido el actual archivo general, que también se encarga del mantenimiento del mismo, y que por lo tanto conoce perfectamente el edificio así como sus instalaciones", subrayan.
Fondos restaurados Y es que más vale prevenir que curar. No en vano, Amurrio lleva gastados en la última década más de 22.000 euros en labores de restauración de su fondo histórico documental. La última se encargó el pasado mes de julio e iba dirigida a recuperar un libro de actas del concejo local, que recoge las sesiones celebradas durante el período que va de 1781 a 1805 y que se encontraba en muy mal estado de conservación. La tarea fue encomendada a una licenciada en Bellas Artes que ya tiene una dilatada experiencia en recuperar del deterioro documentos históricos de esta villa ayalesa. De hecho, se trata del quinto encargo que en los últimos tiempos le adjudica el Consistorio amurrioarra.
El primero se efectuó en verano de 2004 y se concretó en la restauración de un primer lote de 13 libros de actas, cuyos volúmenes más antiguos estaban fechados en 1.837, y cuyo estado de conservación era alarmante y muy cercano a su pérdida material. El segundo encargo tuvo lugar en primavera de 2005 y consistió en la restauración de otro lote de 18 libros de actas, y de un volumen bibliográfico titulado Edificio de Escuelas Públicas y Casa Consistorial, que recoge datos sobre el proceso de construcción que se efectuó entre 1886 y 1903 en el inmueble que alberga el Ayuntamiento. Este volumen, además, incluye cinco planos sobre el proyecto que también se restauraron y dotaron de una encuadernación propia, según explican.
En noviembre de 2008 llegó el tercer encargo. Esta vez para salvar de la desaparición otros 16 documentos históricos, tales como un libro de actas del siglo XIX (1827-1844), otros de gastos, rentas y exacciones de los años 70, y un último de abonados al servicio de aguas entre 1943 y 1963, cuya conservación es obligatoria para el Ayuntamiento.
De igual forma, en julio de 2010 se restauraron documentos pertenecientes a los antiguos ayuntamientos de Lezama y Arrastaria, que pasaron a integrarse al municipio de Amurrio en abril de 1976. En concreto, la labor consistió en conservar actas de las sesiones en las que se reunían los distintos órganos del Ayuntamiento de Arrastaria (el que aglutinaba a las localidades de Delika, Artomaña, Tertanga y Aloria) durante los años 1885 a 1893 y de Lezama (al cual pertenecían las localidades de Baranbio, Saratxo, Lezama, Larrinbe y Lekamaña) durante el período de 1841 a 1868 y durante los años 1902 a 1926.