vitoria. El 23 de mayo de 1980, Vitoria fue designada sede de las instituciones vascas. Treinta y un años después, el título parece cobrar sentido. El Gobierno de Patxi López ha accedido a la exigencia del PP de conceder el año que viene un canon de cinco millones de euros a Gasteiz por su condición de capital vasca para sacar adelante los Presupuestos de 2012. El único inconveniente de la maniobra es que, al formar parte del juego político, no garantiza que la inyección se mantenga en los próximos ejercicios. Blindar su continuidad dependerá exclusivamente de la habilidad del actual alcalde, Javier Maroto, lo que convierte el aparente reconocimiento en un honor descafeinado.

El primer edil reconoció que "no es una inversión y, por lo tanto, no es una partida con un crédito de compromiso", pero subrayó su vocación para que la cifra arrancada sea la primera de muchas. Asimismo, aplaudió el "esfuerzo" realizado por el PP vasco para lograr un canon de capitalidad a través de su enmienda amenazante. El exalcalde socialista, Patxi Lazcoz, no logró el reconocimiento económico pese a sus sentidos discursos en favor de la capitalidad vasca -no se ha separado nunca de la pulsera roja con el eslogan- y pese a que el partido del que forma parte comenzó a liderar ya en su mandato el Ejecutivo autonómico.

El canon se destinará, según explicó Maroto, "al funcionamiento ordinario" de la Administración local. "Y cinco millones dan para mucho", añadió. Eso sí, la cifra es más baja que cualquiera de las barajadas desde que arrancó el debate. Un detalle que no pasó por alto para el alcalde, pero al que trató de restar importancia. "Ha habido propuestas de distintos grupos con distintas cantidades. Pero hay que tener en cuenta la realidad económica y valorar este paso cualitativamente. Todos debemos sentirnos satisfechos porque es algo positivo. Faltaba que el Gobierno Vasco reconociera una realidad evidente, que Vitoria es capital, y por fin tenemos lo que nos merecemos: dinero para invertir y progresar", opinó el primer edil gasteiztarra.

Mucho tiempo ha pasado desde que el Ayuntamiento se planteó tener lo que las capitales de otras comunidades autonómas. En 1992, Unidad Alavesa reclamó el canon en el Pralamento Vasco, pero sólo el PP le apoyó. El PSE se desmarcó con su propia alternativa y los nacionalistas rechazaron la iniciativa. El debate se adormiló y no volvió a despertar hasta marzo de 2001, de la mano de populares y socialistas, quienes cifraron el reconocimiento de este status en seis millones de euros al año. La intención quedó reducida a deseo frustrado y fue Patxi Lazcoz quien intentó resucitarlo con su llegada a la Alcaldía. No hubo día en que el exalcalde no recordara que "Vitoria es la capital de Euskadi", pero sus empeños no fructificaron con un canon. Finalmente, ha sido Javier Maroto el que se ha arrogado el éxito. Sin pulsera, sin eslogan. Sólo porque su partido es la llave de López.