vitoria. El verde de la Vitoria Green Capital pierde brillo a medida que se extiende hacia las áreas más periféricas de la ciudad. Así lo cree la asociación vecinal Salburua Bizirik, que ayer denunció públicamente que su barrio deberá aguardar a 2012 para disponer de un punto de préstamo de bicicletas municipales. Así las cosas, hasta el año que viene el naranja de sus cuadros sólo se podrá apreciar de paso en esta zona de la capital alavesa "debido a limitaciones presupuestarias".

La asociación vecinal venía reclamando desde hace tiempo la implantación de un punto de recogida y entrega de bicicletas municipales en el barrio y con la llegada del nuevo año sus miembros confiaban en que el Consistorio accediera a su solicitud, pero la respuesta recibida por parte del equipo de Gobierno no les ha resultado satisfactoria. "Debido a limitaciones presupuestarias no es posible plantear un nuevo incremento en el número de préstamo de bicicletas para el año 2011. Sin embargo, de cara al año 2012 la propuesta es establecer un nuevo sistema de préstamo de bicicletas con un mayor número de estaciones entre las cuales, con toda probabilidad, estará incluida alguna en el barrio de Salburua. Queda mucho por hacer para la promoción de la movilidad a pie y en bicicleta en la ciudad por lo cual agradecemos y animamos a la ciudadanía a seguir aportando sus ideas y sugerencias", han comunicado los responsables municipales a los vecinos.

Ahora, los integrantes de Salburua Bizirik se preguntan qué significa para su barrio el título Green Capital. "En vista de la actuación municipal, se traduce única y exclusivamente en el aumento de la construcción de miles de viviendas más, que no son necesarias y, que según parece, serán destinadas para los y las habitantes de Bilbao y del Alto Deba", se responden.

Mientras el Ayuntamiento promueve itinerarios a pedales por Salburua, sus vecinos seguirán un año más sin tener acceso al uso de las bicicletas municipales, "de las que ha disfrutado toda la ciudad". "No las disfrutaremos gratis, ya que la crisis y las obras faraónicas del alcalde obligarán al cobro de un servicio", lamentan en Salburua Bizirik.