vitoria. La plataforma SOS Arriaga sigue en pie de guerra. Ayer, tras registrar en el Ayuntamiento ocho alegaciones al proyecto de la estación de autobuses que el gobierno socialista y el PNV han impulsado -firmadas por 200 ciudadanos-, dejó muy claro que no va a permanecer impasible ante la construcción de una infraestructura en el pulmón más grande de la ciudad. El portavoz del colectivo, Ángel Lamelas, anunció que en breve se realizará una concentración en el barrio que mira al parque, a la que proseguirá en marzo una movilización hasta el centro de Vitoria. Dos decisiones consumadas a las que se suma otra posible: la celebración de una consulta popular en Lakua-Arriaga, "principal afectado" por el proyecto, para resarcirse de la negativa del gabinete Lazcoz y su socio preferente a organizar un referendum en toda la ciudad.
Lamelas criticó duramente la estación, y llegó a asegurar que en la última reunión del Consejo Social, el gerente de Ensanche 21 dijo que los técnicos municipales "desaconsejaban" el proyecto y proponían "esperar cinco años", hasta que estuviera resuelto el soterramiento del tren y el desvío del TAV.
