Unas 53.000 hectáreas han sido calcinadas en unos 6.200 siniestros forestales en lo que llevamos de año. Los últimos, activos a día de hoy, en Galicia, donde más de una decena de incendios continúan sin control y ha dejado estos días más de 4.000 hectáreas arrasadas en Ourense, Lugo y Pontevedra. Ourense es la zona más afectada con varias localidades en riesgo. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, lamentó e incidió en que, según las primeras indagaciones, los fuegos habrían sido intencionados.