- EH Bildu decidió no presentar enmienda a la totalidad al proyecto de Presupuestos del Gobierno Vasco como gesto que busca mostrar su “voluntad sincera de diálogo”. La coalición soberanista cree que las Cuentas del Ejecutivo de Iñigo Urkullu no son “las que necesita este país” pero exhibió su disposición a llegar a un acuerdo para “mejorarlas”. Así lo trasladó su portavoz, Maddalen Iriarte, que aprecia una “puerta abierta” al consenso, decisión que puso en valor el propio lehendakari, dando la “bienvenida a la política útil” a la formación abertzale y confiando en que se puedan alcanzar también consensos en otra serie de cuestiones. De producirse el apoyo, sería la primera vez que Bildu respalda unos Presupuestos en Euskadi justo cuando acaba de dar su aval a los del Gobierno del Estado. En 2019 tampoco presentó un veto pero finalmente las negociaciones no terminaron en pacto.

La coalición soberanista presentó 32 enmiendas parciales, por un importe global de 118 millones de euros, “en coherencia” con la propuesta que trasladó el pasado 10 de noviembre a Lakua, y centradas en apartados como la mejora de las políticas de salud, la emergencia climática, el bienestar energético, la protección social, las residencias, los cuidados, y la juventud. Iriarte explicó que las conversaciones presupuestarias están siendo posibles por dos motivos: la “determinación clara y plena” de EH Bildu para “mejorar las condiciones de vida de la ciudadanía”; y “el cambio de actitud” del Ejecutivo vasco y su “disposición a hablar y llegar a acuerdos”. “Hemos visto una oportunidad y estamos haciendo un esfuerzo sincero para aprovecharla”, añadió, instando a Urkullu a “no mirar siempre la aritmética” parlamentaria porque “uno y dos no siempre son tres, y EH Bildu nunca dice no al diálogo”.

Quienes sí presentaron enmienda a la totalidad fueron Elkarrekin Podemos y PP+C’s. La formación morada, que puso sobre la mesa 197 enmiendas parciales, entiende que son unos Presupuestos “continuistas, insuficientes e ineficaces”, y que solo contribuirán a convertir “el paro, la desigualdad social y la falta de oportunidades en un problema endémico” en la CAV. Su portavoz, Miren Gorrotxategi, cree que “no responden a la crisis que se deriva de la pandemia” y censuró que ahondan en el “recorte social”. A su parecer, cuando el IMV da la opción de aumentar la cobertura social en Euskadi, “este Gobierno reacciona con un recorte en la RGI de casi 30 millones, de la mitad de los fondos covid, de hasta 34 millones en acción social, de otros 28 millones en inclusión, de cinco millones en las ayudas de emergencia social y de más de 2 millones en servicios sociales” enumeró. Además, criticó que Lakua no esté por la labor “de hacer lo que se ha convertido en una necesidad evidente: contar con una mayor inversión publica para fortalecer servicios públicos básicos porque lo que hace falta es aumentar las plantillas, más profesores, más enfermeras y más profesionales de la salud en general”.

Por su parte, el PP+C’s registró un total de 1.469 enmiendas parciales y afeó la existencia de 1.000 millones de euros en remanentes acumulados por el Ejecutivo en los últimos ejercicios, mientras “año tras año se disparan las cifras de gasto corriente y quedan sin ejecutar las inversiones”. Este grupo reprocha que se descarte una reforma fiscal que reduzca la presión tributaria en la CAV. Mientras, desde Vox se pidió la devolución del proyecto sin presentar enmienda parcial alguna.

PNV y PSE, además de una enmienda conjunta con EH Bildu y Elkarrekin Podemos-IU para la habitual creación de una partida de apoyo al pueblo saharaui, presentaron cinco de marcado carácter técnico.

“Hay un cambio de actitud del Gobierno en su disposición a hablar y de llegar a acuerdos”

Portavoz de EH Bildu en el Parlamento

“Agradezco y pongo en valor esta decisión que abre una nueva vía, la de la política útil del acuerdo”

Lehendakari

“Son unos Presupuestos continuistas, ineficaces e insuficientes, y ahondan en el recorte social”

Portavoz de Elkarrekin Podemos-IU