Luxemburgo - La primera reunión entre el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, y el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, para abordar el Brexit se saldó ayer sin avances, a falta de una propuesta británica, aunque Bruselas se declaró “paciente” y abierta a estudiar “soluciones”.
Al término del almuerzo de trabajo que ambos mantuvieron en un restaurante de Luxemburgo, Juncker dijo que Johnson, “no ha presentado todavía” una propuesta alternativa a la salvaguardia para evitar una frontera física entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte, el principal punto caliente de las conversaciones ya que Londres la rechaza de plano. No obstante, “Europa nunca pierde la paciencia”, según dejó claro Juncker incluso antes de la reunión.
En ese contexto,Juncker subrayó la “voluntad y apertura” de la Comisión de analizar si esas propuestas cumplen con los objetivos de la salvaguarda; es decir, si permiten evitar una frontera dura en Irlanda. La salvaguarda ha sido el principal motivo de que el Parlamento británico aún no haya aprobado el acuerdo de salida negociado entre el Reino Unido y la Unión Europea.
Esa cláusula de seguridad pretende evitar una frontera física entre las dos Irlandas después del Brexit y está pensada para que Irlanda del Norte quede alineada con algunas normas comunitarias si Londres y Dublín no llegan a un acuerdo sobre la futura relación comercial después de un periodo de transición.
El objetivo de la reunión de ayer, en la que también participó el negociador europeo para el Brexit, Michel Barnier, y el ministro británico para el Brexit, Stephen Barclay, fue “tomar nota de las actuales conversaciones técnicas entre la Unión Europea y el Reino Unido y debatir los próximos pasos”. La Comisión dejó claro que seguirá disponible para trabajar todo el tiempo necesario (literalmente, “las 24 horas de los 7 días de la semana”) y añadió que la cumbre europea de los próximos 17 y 18 de octubre será “un importante hito en el proceso”.
Según la legislación aprobada en el Parlamento británico este mes, Johnson está obligado a solicitar una prórroga del Brexit si no ha alcanzado un acuerdo con Bruselas el 19 de octubre. Un portavoz del primer ministro británico informó ayer de que este y Juncker se mostraron de acuerdo en la necesidad de “intensificar” las conversaciones del Brexit y que las reuniones pronto tengan lugar “a diario”.
El jefe del Gobierno británico reiteró, no obstante, que no pedirá una prórroga de la retirada del Reino Unido de la Unión Europea, prevista para el próximo 31 de octubre. También acordaron que las conversaciones se desarrollen a nivel político entre Barnier y Barclay, según Downing Street.
Johnson insistió en su compromiso con el proceso de paz en Irlanda y su determinación de alcanzar un acuerdo sin la polémica salvaguarda.
En declaraciones posteriores a la cadena BBC, Johnson dijo que la Unión Europea está “harta” del proceso de salida del bloque y de los “interminables retrasos”, y desea “desarrollar una nueva relación con el Reino Unido”. - Efe