GASTEIZ. El Ararteko ha explicado hoy en una nota de prensa que ha recibido una queja sobre estos procedimientos. La persona que ha reclamado comunicó al Defensor del Pueblo vasco que "en alguna comisaría no se garantiza la confidencialidad y privacidad de la comunicación en el momento de esa primera atención".
Según esta queja, esta atención se prestó en la sala de recepción de la comisaría.
Allí, tras una mampara pero en la misma zona común de la recepción, fue donde un agente realizó diversas preguntas a la mujer que acudió a denunciar.
La mujer, según el Ararteko, tuvo que contestar a las preguntas en un lugar donde las respuestas podían ser oídas por otras personas presentes en esa sala de espera.
Este trámite es previo a que se recoja, en su caso, una denuncia por los hechos que relatan las supuestas víctimas. Cuando se llega a esta fase sí que se presta una atención más personalizada en otra sala que tiene las condiciones adecuadas de privacidad, ha concretado el Defensor del Pueblo.
Dado que este problema puede afectar a las víctimas de violencia de género y a otras personas que acuden a l comisaría por otros casos, el Ararteko ha decidido iniciar una actuación de oficio para conocer cómo se presta en general esta primera atención y cómo se garantiza que la información que se proporciona en este primer momento no pueda ser oída por otras personas que se encuentran en el mismo recinto a la espera de ser atendidas.