FORT LAUDERDAL. El equipo de abogados, encabezado por Benjamin Waxman, había presentado una petición de "juicio rápido" ("speedy trial") en un tribunal de Fort Lauderdale (sureste de Florida), pero el juez encargado del caso, Dennis Baily, denegó la solicitud.

Confiaban además los letrados de Ibar en el comienzo el próximo miércoles de la selección de los 12 miembros del jurado que tendrá en sus manos su destino, su absolución o condena.

"Creo que es un error que el juez haya denegado la petición de 'juicio rápido'. Es muy frustrante", dijo a la salida de la audiencia el abogado Joe Nascimento a Efe.

En el ánimo del juez Baily, pesó finalmente más la petición de la Fiscalía de un aplazamiento para poder disponer de más tiempo en la preparación del testimonio de un experto en ADN, al que llamarán a declarar.

Se trata de una opinión (la del experto de la Fiscalía) "no fiable", "no científica", y nuestros expertos están preparados para demostrarlo en el juicio, aseguró Nascimento.

Cabe recordar que la Fiscalía registró en 2016 en un tribunal, 22 años después de los asesinatos, una prueba que pretende relacionar a Ibar con un nuevo "perfil de ADN parcial" hallado en la camiseta con la que se tapó la cabeza uno de los asesinos y que arrojó al exterior de la casa donde se cometió el crimen en 1994.

Pero ni las huellas dactilares recogidas en el lugar del triple asesinato, ni las muestras de pelo ni las de ADN que se hallaron en la camiseta coinciden con las de Ibar, que siempre ha mantenido su inocencia.

En la audiencia de hoy, la defensa de Ibar echó en cara a la Fiscalía las dilaciones y retrasos en el proceso y se enzarzaron las dos partes en una discusión en la que uno de los fiscales llegó a tachar de insultante que se pueda acusar al Estado de querer retrasar el caso deliberadamente.

El magistrado medió en la disputa, resaltó que lo esencial es que se lleve a cabo un "proceso justo" y que, ante la posible coincidencia de las fechas del juicio con las festividades a partir de noviembre, aplazaba el comienzo de la selección del jurado hasta febrero de 2019.

Para Tanya Ibar, esposa de Ibar, resulta "preocupante" esta demora de seis meses por un motivo obvio: facilita que las personas que sean seleccionadas "se formen una opinión" antes del juicio.

La selección del jurado durará entre seis y ocho semanas. Unas 2.000 personas serán entrevistadas y, tras una primera criba y la elección de 18 potenciales miembros, esta se reducirá a doce.

Es el tercer juicio al que será sometido Ibar, de 46 años, por un triple asesinato por los que fue condenado a muerte en 2000, aunque dicha condenada fue anulada en 2016 por el Tribunal Supremo de Florida, que ordenó la repetición del juicio.

El equipo defensor que dirige Benjamin Waxman había recusado en mayo pasado la elección de Baily como magistrado del caso con el argumento de que fue fiscal auxiliar en la misma oficina donde también ejerció Chuck Morton, fiscal del juicio en que Ibar fue condenado a la pena capital.

Ibar recibió entonces esa sentencia al ser hallado culpable de los asesinatos de Casimir Sucharsky, dueño de un club nocturno, y de las modelos Sharon Anderson y Marie Rogers.

El primer juicio, que tuvo lugar en 1998, fue declarado nulo.

La defensa de Pablo Ibar había pedido en 2014 al Supremo de Florida la anulación de la sentencia y la celebración de un nuevo juicio ante el cúmulo de "pruebas exculpatorias" y el alto tribunal le dio la razón en 2016.