GASTEIZ. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, consideró ayer que, tras el anuncio de disolución de ETA, es "evidente" que hay que abordar "una política penitenciaria distinta".

Preguntado por este asunto tras el Consejo de Gobierno, el portavoz vasco, Josu Erkoreka, ha defendido que "reconstruir una convivencia más normalizada" en Euskadi pasa "entre otras medidas, por una política penitencia más humana y acorde con la doctrina del Tribunal Europeo de Derechos Humanos sobre el derecho fundamental a la vida en familia".

Se ha mostrado convencido de que "es posible imprimir una orientación distinta" a la actual política penitenciaria sin necesidad de cambiar la ley y ha deseado que este cambio cuente con "el consenso más amplio posible" porque este asunto guarda "una estrecha relación con el objetivo de construir una convivencia normalizada en el periodo 'post-ETA'".

"Soy consciente de que este consenso en términos absolutos será complejo", ha admitido el portavoz, que cree que todos los partidos e instituciones están "llamados a hacer un esfuerzo de aproximación" en este tema para favorecer la convivencia en Euskadi.