BILBAO. Así se ha expresado el portavoz del Ejecutivo vasco, Josu Erkoreka, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en referencia al anuncio de Ciudadanos y de Compromís de votar el jueves en el Congreso en contra de la nueva Ley del Cupo vasco.

Por su parte, EH Bildu también ha anunciado que se abstendrá en la votación de la Ley del Cupo, una posición que también ha sido criticada por Erkoreka, quien no entiende que la coalición vasca no dé su apoyo a una de las más destacadas singularidades de Euskadi.

El jueves la Cámara Baja votará los proyectos de la Ley Quinquenal del Cupo para el período 2017-2021 y de la reforma del Concierto Económico, que previsiblemente saldrán adelante pese a la oposición de Ciudadanos y de Compromís.

El Cupo es la aportación que hace Euskadi cada año a las arcas comunes del Estado por las competencias no transferidas al Gobierno autonómico, como infraestructuras (aeropuertos, puertos, ferrocarriles), defensa y representación exterior. Con este dinero se contribuye también al mantenimiento de las instituciones comunes, como el Congreso y el Senado.

La cuantía del Cupo se determina en leyes quinquenales pactadas por los gobiernos central y vasco y el pasado mes de mayo ambos ejecutivos llegaron a un acuerdo para el período 2017-2021 enmarcado en el pacto entre el PNV y el Gobierno de Mariano Rajoy para que los nacionalistas apoyaran los Presupuestos Generales del Estado de este año.

Erkoreka ha considerado "radicalmente injustas" las críticas al Cupo que, a su juicio, buscan predisponer a la sociedad española en contra del autogobierno vasco y ha subrayado que su cálculo no es insolidario con otras regiones y no condiciona la financiación del resto de las comunidades autónomas del régimen común.

Ha recordado que el Concierto y el Cupo son dos "instituciones" avaladas por razones históricas, jurídicas, políticas y económicas que datan de 1878 y que, salvo en el caso de Bizkaia y de Gipuzkoa durante el franquismo, han estado vigentes en regímenes como la Restauración, la dictadura de Primo Rivera y la segunda República.

"Su arraigo histórico es innegable y nadie puede poner en cuestión su encaje jurídico en la Constitución y en la Unión Europea", ha recalcado el portavoz vasco.

Erkoreka ha insistido en que el Concierto Económico es el sistema que articula las relaciones económico-financieras entre Euskadi y el Estado y lo hace "con claridad y transparencia".

Además, ha explicado que el resultado del Cupo solo es positivo si la gestión del sistema fiscal es comparativamente mejor en Euskadi que en el Estado pero si es peor "puede estrangular financieramente a las instituciones vascas".

Ha indicado que el País Vasco aporta todos los años al Estado en concepto de Cupo el 6,24 % de lo que el Gobierno central presupuesta en las materias de su competencia en Euskadi.

Sin embargo, el País Vasco representa en el Estado el 4,6 % de la población y el 6,1 % del PIB, por lo que el Cupo "está por encima del peso demográfico de Euskadi y del que tiene en el conjunto del PIB del Estado".

Sobre el sistema de financiación de otras comunidades, el portavoz del Gobierno de coalición PNV-PSE ha defendido que se busque una fórmula que "se aproxime lo más posible al Concierto vasco" pero a través del sistema general que rige para el resto de las regiones.

En su opinión, la afección de un mayor o menor Cupo a la financiación del resto de las comunidades "es tan exiguo que casi tiende a cero por su dimensión y envergadura".

En relación a la anunciada abstención de los dos diputados de EH Bildu en el Congreso en la votación de la Ley del Cupo, el portavoz del Ejecutivo ha señalado que no entiende "en absoluto" esta posición de negarse a prestar apoyo al autogobierno vasco.

En un contexto en el que existe una campaña en el Estado principalmente avalada por Ciudadanos en contra del Cupo y del Concierto, es "francamente incomprensible e inexplicable" que EH Bildu se sume a esa estrategia", ha lamentado Erkoreka.