GASTEIZ. Urkullu ha intervenido este domingo en el Alderdi Eguna que la formación jeltzale celebra en las campas alavesas de Foronda bajo el lema 'Pausoz pauso gure bidean' y que conmemora el 40º aniversario de su primera edición, que tuvo lugar en San Miguel de Aralar el 25 de septiembre de 1977.

Tras señalar que el Estado, "está perdido en su laberinto", el lehendakari ha dicho que Catalunya "quiere votar con todas las garantías". "Euskadi y Catalunya somos pueblos que tenemos ese derecho. Tenemos el derecho para votar con todas las garantías", ha añadido.

Urkullu ha recordado que ha mantenido una posición de "prudencia y respeto" con Catalunya, y ha defendido "el diálogo y la negociación política", pero "no ha habido respuesta y el conflicto ha desbordado todos los límites".

Urkullu ha subrayado que "los conflictos requieren soluciones políticas" y ha considerado que "el punto de partida es reconocer la existencia de dos naciones que quieren decidir su futuro en democracia, en libertad, y con garantías".

El lehendakadi ha advertido de que la situación de Catalunya "debe abordarse con responsabilidad", y ha criticado que "hace siete años los poderes del Estado mutilaron el Estatut acordado entre las instituciones catalanas y las españolas, refrendado por el pueblo catalán". "No midieron las consecuencias y hoy pregunto al Gobierno español si ha valorado las consecuencias futuras de las decisiones judiciales, penales y policiales que está impulsando", ha interpelado al Gobierno Rajoy.

A su juicio, estas decisiones del Ejecutivo popular "llevan a un escenario de escisión social y ruptura política e institucional que será muy difícil de revertir en mucho tiempo", por lo que ha pedido al Gobierno de Mariano Rajoy que "no repitan el error de hace siete años".

Según ha asegurado, "hoy, a los ojos del mundo, el Gobierno español forma parte del problema y no de la solución". Por ello, ha pedido "responsabilidad y respeto". "Pido un paso al diálogo que abra la puerta a una solución. No hay otra vía", ha manifestado, para reiterar su propuesta de "diálogo con voluntad política real para conciliar, democráticamente, las aspiraciones mayoritarias de las sociedades española, catalana y vasca", y asegurar que "la solución es un referéndum legal y pactado".

Asimismo, ha instado al Estado a cambiar el modelo de "unidad impuesta" que recoge la Constitución "que permite anular el autogobierno unilateralmente", para señalar que "la vía vasca es cumplir el Estatuto, actualizar el autogobierno, garantizar la bilateralidad, asumir la realidad plurinacional del Estado, arbitrar una vía de consulta legal y pactada, y la libre adhesión".