Bilbao - La causa abierta por la Justicia argentina por los crímenes cometidos durante la dictadura de Franco avanza, a pesar de las dificultades y la falta de colaboración que la jueza María Servini de Cubría se está encontrando por parte del Estado español. La magistrada ha impuesto una fianza de 21.250.000 pesos -más de un millón de euros al cambio- al exministro franquista Rodolfo Martín Villa si este desea eludir la petición de ingreso en prisión en el país sudamericano. La defensa letrada de Martín Villa ha recurrido la orden de Servini, si bien la Cámara de Apelaciones, el organismoque instruye este caso en particular, ha citado a su abogado para comparecer en sede judicial este próximo lunes.
Imputado en la causa argentina contra los crímenes del franquismo y más específicamente por su responsabilidad en los sucesos de Gasteiz del 3 de marzo de 1976 que generaron cinco muertos, aún así Martín Villa puede ganar algo de tiempo. Su abogado podría prorrogar la apelación, por lo que la solicitud de fianza podría demorarse al abrirse un nuevo frente judicial. El exministro de Relaciones Sindicales bajo la dictadura quedará exento de entrar en la cárcel si hace efectivo el pago de la fianza, si bien tampoco es un requisito indispensable. Servini estableció esa cantidad en concordancia con una resolución de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, la cual revocó el pasado 22 de agosto un fallo de su Juzgado en el que la magistrada denegaba su posible exención por segunda vez. Así lo dio a conocer ayer el diario digital Público, que también avanzó que la Justicia argentina escuchará los nuevos argumentos del abogado defensor contra esta nueva decisión.
Sabido que los delitos de lesa humanidad no prescriben, la situación judicial de Martín Villa podría llegar a enrocarse más de lo que ya está. El exministro, sobre quien la Justicia argentina dictó una orden internacional de detención preventiva y extradición al ser investigado por 11 homicidios y crímenes como robo de menores o torturas cometidos durante el franquismo, aseguró el julio pasado que no pondría objeciones a acudir a declarar ante Servini a Argentina, siempre que no fuera detenido nada más pisar el país sudamericano. Inicialmente la Cámara Criminal y Correccional Federal de Argentina accedió a su petición, pero la magistrada no hizo lo propio al argumentar que el exministro estaría involucrado en delitos de gravedad. “Hechos atroces”, según afirmaba durante la investigación, por lo que volvió a cursar una segunda orden de arresto.
La magistrada, de hecho, basó parte de su solicitud para la extradición de Martín Villa en el testimonio de víctimas vascas del franquismo, a las que pudo atender en un viaje efectuado a Euskadi en septiembre del pasado año. Pero la justicia española ha taponado todo intentona de la Justicia argentina al advertir que los delitos han prescrito y que el exministro estaría amparado por la Ley de Amnistía. Las peticiones de extradicción, asimismo, han caído en saco roto.
“no me dejan declarar” A pesar de que sobre su persona sigue pesando una orden internacional de busca y captura, el exministro sigue defendiendo que no le dejan declarar. Así lo hizo en la conmemoración del 40 aniversario de las elecciones generales de 1977, las primeras tras la muerte de Franco, en la que recibió una medalla de manos del rey Felipe VI en el Congreso. “A mí se me ha impedido declarar. Ya, tal y como están las cosas, me importa más pinchar el globo declarando que lo que luego pueda decir la jueza porque, al fin y al cabo, podría recurrir”, declaró ante los medios. Hasta que no abone la fianza de más de un millón de euros, sin embargo, sobre Martín Villa seguirá pesando una orden internacional de detención. - DNA