- Los últimos contactos entre el PNV y el Gobierno español no han dado frutos. Salvo que haya acuerdo in extremis, los jeltzales presentarán hoy a las 14.00 horas su enmienda a la totalidad de los Presupuestos estatales. El partido de Andoni Ortuzar no quiso dar ayer por hecho este desenlace, pero todo apunta en esa dirección y, de hecho, comenzó a proyectar lo que sucederá a partir de hoy y hasta la votación del jueves, unos días en los que todavía tendría margen para acordar y retirar ese veto. En ese sentido, Ortuzar no presentó ayer la posible enmienda a la totalidad como un portazo, sino como una decisión inevitable a día de hoy por la inexistencia de un acuerdo, pero reconducible en los próximos días si se produce un entendimiento entre las partes. En tono conciliador, llegó a quitar hierro a la enmienda al asegurar que “no le daría un valor especial”.

El PNV tiene intención de apurar las negociaciones y no va a romper la baraja. Entiende que la situación de minoría de Rajoy y su necesidad de apoyos le brindan una oportunidad histórica para encarrilar las principales reivindicaciones vascas. “Es una oportunidad que a lo mejor no vuelve a repetirse”, explicaban ayer desde Sabin Etxea. Por esa misma razón, no está haciendo mella en su determinación el clima generado por parte de Podemos y la izquierda abertzale cuando trazan un cordón sanitario en torno al PP con motivo de la corrupción. Ni la moción de censura de Podemos contra Rajoy, ni las concentraciones que ha impulsado Sortu ante las sedes vascas del PP van a desviarlo de su propósito. El PNV asume que la suya es una decisión de riesgo, pero que está “defendiendo los intereses de Euskadi”.

El principal escollo es el Cupo, el dinero que paga Euskadi al Estado por las competencias no transferidas. En concreto, el PNV y el Gobierno vasco quieren fijar con claridad el método de cálculo para los próximos cinco años a través de una nueva Ley Quinquenal. Se trata de evitar otro conflicto en torno al cálculo de las cantidades y que se repita una y otra vez la misma historia en las negociaciones presupuestarias. Además, hay otras cuestiones pendientes como la factura eléctrica que sobrecarga a las empresas vascas, y asuntos competenciales.

Rajoy ha retornado ya de su gira latinoamericana y no es descartable que pueda dar un impulso político a las conversaciones en estas últimas horas antes de que acabe el plazo para presentar las enmiendas. Aunque hubiera enmienda a la totalidad, el plazo para negociar no se consumiría hasta el próximo jueves, cuando serán sometidas a votación en el Congreso. La sesión arrancará el miércoles a las 12.00 horas con la intervención del ministro Montoro, al que le seguirán los grupos que han presentado su veto a las Cuentas.

En una entrevista con RNE, Ortuzar aseguraba ayer que en este momento su voto sería contrario, pero que hay tiempo hasta la próxima semana. “Nuestra vocación es la de negociar hasta el último minuto y a nosotros, cuando entramos a las negociaciones, nos gusta llegar a acuerdos. No entramos a las negociaciones como una pose pero, a día de hoy, con honestidad, tengo que decir que estamos lejos”, dijo. El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, insistió en que aún “no hay acuerdo”, pero añadió que no es una rareza que los asuntos que parecen atascados “en el último segundo, por arte de magia”, se solucionen.