WASHINGTON. "Ya lo veré cuando llegue el momento", ha señalado Trump, al hablar sobre lo que el republicano cree que son unas elecciones amañadas en su contra. "Te mantendré en suspenso", ha señalado.

Las Vegas está siendo el escenario del tercer y último debate que se celebra entre los dos candidatos a suceder a Barack Obama, en un momento en el que las encuestas muestran la caída de apoyo del magnate multimillonario, envuelto en una serie de polémicas por sus declaraciones sobre las mujeres, afirmaciones que han vuelto a colocar el machismo de Trump en el centro del debate.

Tras las palabras de Trump, negándose a reconocer si aceptará los resultados de los comicios, Clinton ha señalado que lo que en realidad está haciendo es "denigrando" la democracia estadounidense.

"Me siento aterrada de que alguien que está nominado por uno de los dos grandes partidos (a la Casa Blanca) tome esta posición", ha afirmado.

Durante el último debate ambos han discutido sobre diferentes aspectos, entre ellos la deuda nacional --que en 2015 representa el 105 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB)--, la filtración de correos de WikiLeaks, la situación en Siria y la inmigración, la Segunda Enmienda y el derecho a la tenencia de armas, Rusia o la polémica sobre las acusaciones por agresión sexual contra Trump.

En este sentido, Trump ha insistido en que la publicación de diferentes declaraciones de mujeres que aseguran que fueron víctimas de actitudes inapropiadas durante los últimos años por el ahora candidato a la presidencia es una estrategia de Clinton para desacreditarlo de cara a las elecciones.

No obstante, la ex secretaria de Estado ha señalado que el republicano cree que desprestigiando a las mujeres él se convierte en alguien "más grande".

MARIONETA DE PUTIN

Otro de los aspectos que han resaltado del debate han sido las declaraciones sobre la relación entre el republicano y el presidente de Rusia, Vladimir Putin.

Clinton ha calificado a Trump como una "marioneta" del ruso, y le ha pedido que condene lo que ha definido como un intento por parte de Moscú de utilizar los ciberataques para influir en favor del republicano de cara a las elecciones.

Sin embargo, el magnate ha asegurado que Putin no tiene respeto "ni por Clinton ni por el presidente, Barack Obama", sugiriendo que él sería mejor opción para alcanzar la Presidencia.

"Eso es porque preferiría tener una marioneta como presidente de Estados Unidos", ha replicado la es secretaria de Estado, a lo que Trump ha contestado: "No, tú eres la marioneta".

Acto seguido, si bien ha señalado no es su "mejor amigo", ha reconocido que Putin ha dicho "cosas buenas" sobre él, y que sería bueno si Washington y Moscú trabajaran juntos en la lucha contra el autodenominado Estado Islámico.

En el último debate presidencial de cara al 8 de noviembre, ambos han abordado la cuestión sobre la posesión de armas y Trump ha criticado que, en caso de ganar Clinton, la Segunda Enmienda de la Constitución estadounidense "será una réplica muy, muy pequeña de lo que se tiene ahora".

También ha habido espacio en el encuentro para hablar sobre inmigración, uno de los temas que le han valido serias críticas al republicano.

En este contexto, Clinton ha reconocido que los delincuentes violentos sí deben ser deportados del país, pero ha aprovechado la situación para traer a colación la reunión entre Trump y el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, burlándose de su actuación.

En este sentido, la ex secretaria de Estado ha asegurado que Trump se quedó mudo en el encuentro, después de haber defendido a capa y espada su propuesta de levantar un muro entre Estados Unidos y México.