SIRIA. El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó este martes el ataque con misiles contra al menos cinco edificios médicos y dos escuelas en Siria, con un saldo de cerca de 50 muertos, incluyendo niños.
Por medio de uno de sus portavoces, Farhan Haq, Ban dijo estar "profundamente preocupado" por los informes sobre estos ataques, que calificó como una "descarada violación de las leyes internacionales".
Los ataques, según informó en la rueda de prensa diaria el portavoz de la ONU, se produjeron en las provincias de Alepo e Idlib. Haq dijo que la cifra de víctimas procedía de distintas fuentes, incluida Unicef.
Aunque la fuente dijo no tener información adicional sobre quién está detrás de estos ataques, activistas sirios y ONGs apuntaron la responsabilidad de la aviación rusa y de las fuerzas del régimen sirio presidido por Bachar al Asad.
Según el portavoz de la ONU, estos ataques tienen graves consecuencias para un sistema médico y educativo en Siria, que de por sí viene sufriendo el desgaste por el conflicto bélico que estalló en ese país en 2011.
Además, estas acciones "ensombrecen" los resultados de la reunión sobre el proceso de paz en Siria alcanzados el pasado 11 de febrero en Münich, agregó el portavoz.