MANILA. Al menos 19 personas han muerto, 8 han desaparecido y 124.416 han resultado damnificadas en Filipinas por las inundaciones y deslizamientos de tierra causados por las lluvias torrenciales caídas en las últimas semanas, informan hoy fuentes oficiales.

La zona más afectada se encuentra en el norte del país e incluye, entre otras áreas, a las regiones de Luzón Central y Cagayan Valley, además de Manila, según el último informe del Consejo de Gestión y Reducción de Riesgo de Desastres de Filipinas.

Al menos 3.100 personas se encuentran atendidas en 25 centros de evacuación y otras 32.676 reciben asistencia fuera de estas instalaciones.

Un total de 18 casas han quedado destruidas y 68 más han resultado dañadas por las riadas y deslizamientos de tierra.

La agencia filipina calculó que el daño provisional a los arrozales y maizales asciende a unos 3,9 millones de pesos (cerca de 79.000 euros o 86.000 dólares); y a las carreteras y puentes, a unos 1,5 millones de pesos (30.000 euros o 33.000 dólares).

La deforestación, la proliferación de yacimientos mineros ilegales, la pobre red de infraestructuras y el chabolismo aumentan el impacto de las lluvias y los entre 15 y 20 tifones que visitan Filipinas durante la época del monzón.

La estación lluviosa en Filipinas empieza por lo general entre mayo y junio y concluye entre noviembre y diciembre.