MADRID. En declaraciones a los periodistas en el Senado, el portavoz parlamentario en la Cámara Baja ha asegurado que se pueden cambiar los proyectos que se tramitan en el Parlamento a través de las enmiendas y que su grupo lo está estudiando, pero "sin que incida en el texto", ni repercuta en la decisión definitiva del Tribunal Constitucional.
"Tenemos un recurso y hay que ser coherente", ha dicho Hernando, quien ha admitido que existe un "proceso de diálogo interno para buscar un consenso" dentro del partido y con la sociedad, "siempre desde los principios del PP y bajo la jurisprudencia del TC y del derecho internacional".
Hernando ha insistido en que "el aborto no es un derecho, sino que desgraciadamente es un trauma para muchas mujeres" y que su grupo pretende buscar "dentro de lo que es el respeto a la jurisprudencia, defender esos principios".
Ha recordado que el próximo martes defenderán en el debate de toma de consideración de la proposición de ley que plantea la reforma de la ley del aborto, el "clamor popular de que las menores cuando toman una decisión tienen que estar acompañadas de sus familias y ayudadas por sus familiares y sus padres".
El portavoz del grupo ha opinado que entiende que sí se va a respetar la disciplina dentro del grupo, porque -ha dicho- que se está "haciendo un esfuerzo para conseguirlo".
"Este ha sido nuestro objetivo siempre y cuando llegue el martes creo que tendremos ese consenso absolutamente perfilado y confío también en que ese consenso se extienda a otras fuerzas políticas", ha concluido.
A este respecto, el vicesecretario de Organización del PP y director de la campaña electoral, Carlos Floriano, ha subrayado que su partido "está donde estaba", pues nunca ha considerado que el aborto sea un derecho.
Floriano ha recalcado esa idea, pero ha indicado que el PP está "a la espera de lo que diga el Tribunal Constitucional" sobre el recurso que presentó contra la reforma de la ley del aborto aprobada durante el gobierno socialista.
Asimismo, ha reafirmado su compromiso con el cambio de la ley para que las chicas de entre 16 y 18 años no puedan abortar sin el consentimiento paterno y su deseo de que la reforma que se tramita en el Congreso recabe el máximo consenso.