HONG KONG. La policía informó hoy de que las dos personas, un hombre y una mujer, fueron detenidas ayer por no devolver el dinero que habían recogido.
Los agentes hallaron en casa del hombre unos 200.000 dólares en efectivo debajo del colchón de una de las camas de la vivienda.
Los dos detenidos eran los pasajeros de un taxi que pasaba por la avenida Gloucester Road en el momento en el que el furgón comenzó a "regar" la carretera con dinero, y fueron identificados mediante las imágenes tomadas por cámaras de seguridad cuando se produjo el episodio.
Un furgón de la compañía de seguridad británica G4S, especializada en transporte de dinero, perdió 15 millones de dólares (cerca de dos millones de dólares) el día 24, cuando la puerta trasera del vehículo se abrió accidentalmente y el dinero salió literalmente volando.
En ese momento varios transeúntes y conductores acudieron a la carretera, una transitada vía de cuatro carriles en el centro de la ciudad, para recoger el dinero, en billetes de 500 dólares de Hong Kong (unos 65 dólares).
Hasta primeras horas de hoy sólo un tercio de los casi dos millones de dólares habían sido devueltos, informó la policía.
Las autoridades señalaron que 30 personas habían entregado el dinero, entre ellas una persona que devolvió el equivalente a 250.000 dólares.
Agentes de la brigada criminal de Hong Kong entrevistaron a comerciantes y vecinos de la zona donde tuvo lugar el "lluvia millonaria" como parte de su búsqueda de la gente que se fue con el dinero.
La policía hizo un nuevo llamamiento para que los ciudadanos devuelvan el dinero restante y señaló que, de lo contrario, podrían ser acusadas de robo y enfrentarse hasta a diez años de prisión.
Los tres vigilantes que viajaban en el furgón no se percataron de los sucedido hasta que llegaron a su destino, 14 kilómetros más allá de donde tuvo lugar el incidente.
Policías armados tuvieran que acordonar la zona para evitar que más gente saltara a la calzada para recoger el dinero en el momento del suceso.
La furgoneta transportaba en total más de 67 millones de dólares estadounidenses en efectivo.
El Banco de China, que contrató el servicio de la empresa de transporte para trasladar el efectivo desde una de sus oficinas, dijo ayer en un comunicado que la compañía había pedido disculpas por el incidente y se había comprometido a sufragar las pérdidas.