MADRID. Ruz ha adoptado esta decisión en el auto en el que cierra la instrucción de la pieza separada que abrió el pasado 29 de julio para propiciar el enjuiciamiento por hechos de la "primera época" de la trama, desde 1999 a 2005, teniendo en cuenta que uno de los principales imputados, el extesorero del PP Luis Bárcenas, lleva más de un año en prisión preventiva.

Este es el paso previo, técnicamente conocido como transformación de las diligencias en procedimiento abreviado, para abrir juicio oral contra esos 43 imputados, a los que ha añadido en calidad de responsables civiles como partícipes a titulo lucrativo a Mato y a Gema Matamoros, esposa del exalcalde de Majadahonda (Madrid) Guillermo Ortega.

El magistrado considera a Mato "partícipe a título lucrativo" de los regalos de la red Gürtel que recibió su exmarido, el exalcalde de Pozuelo de Alarcón (Madrid) Jesús Sepúlveda, lo que supone que, si bien no se la acusa de ningún delito, se la podría enjuiciar como responsable civil, según fuentes jurídicas.

Según el auto, la ministra y sus hijos se habrían beneficiado de "regalos en forma de servicios turísticos" de la trama Gürtel entre los años 2000 y 2004 por una cantidad de 31.580 euros entre billetes de avión, tren y alquiler de coches y alojamiento en hoteles de España y del extranjero.

El juez afirma que "todos los pagos y regalos efectuados al imputado Sepúlveda y a su entorno familiar aparecen indiciariamente vinculados, bien a la consideración de su condición de senador y de alcalde, bien en atención a su posible intermediación en adjudicaciones públicas".

Según Ruz, estos regalos a la familia Sepúlveda-Mato fueron "tanto desplazamientos en medios de locomoción (avión, tren y alquiler de vehículos) como alojamientos en establecimientos hoteleros en España y en el extranjero y otros servicios turísticos".

De estos regalos, dice Ruz, se beneficiaron "Sepúlveda y/o distintos miembros de su círculo familiar o doméstico (tales como su mujer Ana Mato Adrover y los hijos de ambos, así como otras personas vinculadas a la unidad familiar)".

Los viajes los gestionaba la agencia de viajes de Gürtel, Pasadena, y se facturaban bajo el concepto de "clientes central", de forma que "la deuda contable generada por los mismos y anotada en la cuenta de cliente de Jesús Sepúlveda era saldada con cargo a fondos provenientes de la caja B" de la trama corrupta liderada por Francisco Correa.

De esta manera, abunda el juez, los servicios que prestaba Pasadena a Sepúlveda "generaban un cobro ficticio, puesto que en lugar de desembolsarlos el beneficiario de los mismos eran abonados con fondos ajenos a los circuitos económicos de la organización, todo ello bajo las instrucciones de Francisco Correa y Pablo Crespo".

El auto indica que 31.580 euros correspondieron a servicios de los que se habría beneficiado la familia Sepúlveda-Mato, e incluye un cuadro con todos esos regalos.

En el cuadro se muestran unos setenta regalos diferentes en distintas fechas, que la trama Gürtel puso a nombre de "Sres. Sepúlveda y Mato", "Hijos Sres. Sepúlveda-Mato", "Ana Mato" o "Hija Sres. Sepúlveda-Mato".

Algunos de ellos son billetes de avión y estancias en hoteles por diferentes cantidades, que van desde los 10 hasta los 3.889 euros.

El exmarido de Mato también se benefició de otros regalos de la trama "en forma de organización de eventos familiares y pago de servicios de carácter privado" de 2001 a 2005, por un total de 5.108 euros, abonados por transferencia, cheque bancario o entregas en efectivo.

De este dinero se hicieron cargo varias empresas de la trama Gürtel, como Special Events o Easy Concept, pero no consta que Sepúlveda lo devolviera luego.

"De acuerdo a todos los indicios obrantes en la causa, tales pagos efectuados al señor Sepúlveda a través de regalos para el disfrute de sus familiares incluirían" cuatro pagos en concepto de "Artículos de Louis Vuitton" por 610 euros, "Fiesta cumpleaños infantil (globos y payasos)" de junio de 2001 por 669 euros, "Fiesta payasos" de junio de 2002 por 1.996 euros y "Comunión hija Jesús Sepúlveda" de mayo de 2005 por 1.832 euros.

Sepúlveda se benefició asimismo de la financiación de los gastos generados por su oficina electoral en las elecciones municipales de 2003 y otros pagos vinculados a la referida campaña electoral para el Ayuntamiento de Pozuelo por un total de 111.864 euros.

"Estos fondos se aplicaron al pago directo de servicios prestados para el despacho electoral a través de terceros empleando a su sociedad Special Events para facturarlos, y a la asunción del coste de actos electorales llevados a cabo", afirma el juez en el auto.

Dentro de este dinero hay facturas de proveedores de material de oficina y electrodomésticos de tiendas de menaje del hogar por 15.600 euros para la oficina electoral del PP y entregas en efectivo por 60.000 euros.

También se incluyen "los vehículos recibidos por el señor Sepúlveda de parte de la organización del señor Correa", como un Range Rover por 83.000 euros y un Jaguar por 52.070 euros.

"A través de las distintas vías antes descritas, el imputado Jesús Sepúlveda percibió, como mínimo, entre 1999 y 2005 un total de 732.640 euros".