gasteiz - El portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, defendió en la mañana de ayer que en un presupuesto “eminentemente social” como el que el PNV tiene previsto presentar para el próximo ejercicio -con dos de cada tres euros destinados a este tipo de políticas- “no es incompatible” el acuerdo de EH Bildu con el apoyo del PP, pero la reunión que tan solo unas horas después mantuvieron el lehendakari, Iñigo Urkullu, y la presidenta de los populares vascos, Arantza Quiroga, echó por tierra esta previsión optimista.

El PP no estará en un presupuesto participado por la izquierda aber-tzale que hoy en día representa EH Bildu en el Parlamento autonómico. Quiroga no dejó lugar a las dudas y pese a que puso sobre la mesa la necesidad de enterrar las querencias partidistas en pro de la “unidad” política, su emplazamiento al lehendakari para que elija “compañero de viaje” en la búsqueda de acuerdos de país cierra las puertas a la presencia de las cuatro familias políticas vascas en una insólita alianza unitaria.

La presidenta de la formación conservadora compartió durante dos horas y cuarto un repaso a la actualidad de la sociedad vasca con el jefe del Ejecutivo autonómico en la tercera reunión de la ronda de encuentros que Urkullu inició la semana pasada con la líder socialista, Idoia Mendia, y que retomó el lunes con el presidente de EH Bildu, Hasier Arraiz.

Al igual que en las reuniones precedentes, Quiroga tendió la mano al lehendakari para buscar salidas consensuadas a la complicada situación lastrada por la crisis, pero desde el inicio de su intervención ante los medios de comunicación en Gasteiz puso en evidencia que Urkullu deberá “elegir”.

La fórmula económica y, sobre todo, identitaria que Arraiz llevó hasta Lehendakaritza no tiene cabida en ningún acuerdo del que participé el PP, una formación desde donde sitúan como principal condición para apoyar las Cuentas del PNV que se cumpla el objetivo del déficit. Bajo esta premisa, Quiroga mostró su disposición a mantener vivo el acuerdo al que se sumó el pasado año después de que socialistas y jeltzales unieran sus fuerzas en el proyecto de Cuentas. El PP se siente cómodo en un pacto de estabilidad institucional al que no ponen fecha de caducidad, siempre y cuando aleje de la suma a la izquierda abertzale.

En este contexto, Quiroga definió la actuación que deberá llevar a cabo el lehendakari como un ejercicio de elección entre la “distracción y los excesos” que, a su juicio, encierran las propuestas de la coalición soberanista, o la “estabilidad y crecimiento” que ofrece su partido.

En este camino que la presidenta del PP vasco pretende compartir con el lehendakari, destacó los “muchos puntos de unión” en el diagnóstico realizado por ambos a lo largo de su encuentro en el que la dirigente guipuzcoana abogó por unas políticas sociales “realistas” que deben estar ligadas a la “reforma de Lanbide” para impulsar la obtención de empleo. La disposición del PP a colaborar con el PNV no incluye su participación en una Ponencia de Paz y Convivencia que, ahora en situación de stand by, podría ser reactivada sobre la reformulación del suelo ético que abordaron en su encuentro Urkullu y Arraiz.

modificaciones Quiroga no espera cambios en este sentido y aseguró que el lehendakari no le había comentado que estuviera previsto modificar el texto actual que, entre otros aspectos, rechaza la existencia de ETA, sino que “el documento se mantendrá”, pese a “trabajar en algún planteamiento”, apostilló.

A pesar de la versión de la presidenta del PP, fuentes de Lehendakaritza afirmaron tras el encuentro que Urkullu le había trasladado a Quiroga el compromiso de trabajar “en un nuevo suelo ético” para desbloquear la Ponencia de Paz.

Asimismo, el jefe del Ejecutivo le explicó a la dirigente conservadora, según estas mismas fuentes, que la reactivación económica, la generación de empleo y las políticas sociales priorizarán la gestión gubernamental, un reto para el que Urkullu recalcó la necesidad de acordar “con el máximo consenso posible” un decreto en el que los servicios sociales serán los protagonistas.