gasteiz - A falta de trece meses para que gasteiztarras y el resto de alaveses elijan en las urnas a sus representantes, el PNV dio ayer el banderazo de salida con la puesta de largo de sus dos cabezas de lista, Gorka Urtaran y Ramiro González, y el listón situado en el reto de desbancar al PP del Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación Foral.
Así lo expuso ayer flanqueado por sus candidatos el presidente jeltzale en Araba, Xabier Agirre, quien aspira en los que serán sus últimos comicios en activo a despedirse de la primera línea política con dos compañeros de partido al frente de las dos instituciones "señeras" del territorio.
La consecución de este ambicioso proyecto pasa, entre otros factores, por aprovechar el impulso del dulce regusto que dejó en los paladares jeltzales la última cita electoral, los comicios autonómicos de octubre de 2012 en los que la plancha nacionalista se impuso tanto en el territorio alavés como en su capital.
De momento, la familia jeltzale ha hecho los deberes y, a diferencia de lo sucedido en la antesala de las anteriores elecciones municipales y forales, celebradas en 2011, la ausencia de divergencias internas ha permitido una designación calmada y, sobre todo, unánime de ambos líderes. "Era importante que ellos mismos tuvieran la certeza de la unanimidad", destacó Agirre en la presentación que tuvo lugar en la céntrica sede del Araba Buru Batzar.
Conocidos los nombres que liderarán las planchas, el líder territorial jeltzale destacó que la configuración del resto de las listas se retrasará hasta el último trimestre de este año. Hasta entonces, González y Urtaran seguirán al frente de sus respectivos equipos en la oposición al Gobierno de la Diputación y el Consistorio gasteiztarra.
La voz del PNV en las Juntas Generales ha compaginado esta labor con el trabajo de abogado que ejerce desde hace casi tres décadas en Vitoria. Afronta su primer gran reto político al estrenarse como cabeza de lista y convencido de que su partido es "la única alternativa" a la "falta de liderazgo" que constata en el Gobierno foral presidido por Javier de Andrés.
Urtaran, por su parte, repite como aspirante al frente de la lista municipal del PNV después de que las severas discrepancias entre la afiliación jeltzale le situaran como candidato de consenso en 2011. Tras bregarse en los últimos tres años en la oposición municipal, llega la hora de recoger los frutos de ese bagaje político y afrontar con renovadas garantías la oportunidad de devolver al PNV una alcaldía que se le resiste desde que el histórico José Ángel Cuerda concluyera su extenso periplo consistorial en 1999.
En su presentación de ayer, Urtaran hizo especial hincapié en el año de trabajo que aún resta para afrontar la campaña electoral y puso en valor la capacidad de su partido para a través de los acuerdos alcanzados en el Ayuntamiento haber aplicado durante esta legislatura "el rigor económico; lo que no hizo el PSE", y "evitar los recortes indiscriminados; lo que no hizo el PP".