gasteiz. Lo dicen las encuestas constantemente. El número de personas que conoce el euskera en Álava ha crecido de una forma considerable durante los últimos años fruto del esfuerzo realizado por la escuela y también por los distintos centros de alfabetización de adultos. Sin embargo, su uso continúa estancado. Los alaveses tienen problemas para encontrar espacios donde poder comunicarse en esta lengua, un obstáculo en el camino que se intenta superar a través de programas como el de Mintzalaguna. Un total de 350 personas se han inscrito ya este curso en esta iniciativa que busca incidir en la normalización del euskera en todo el territorio, y especialmente en su capital, Vitoria. Los participantes se reúnen en pequeños grupos al menos una vez a la semana para relacionarse en euskera mientras toman un café, potean, quedan para pasear o disfrutar de algún espectáculo.
La dinámica permite trabajar, en un contexto de ocio, la fluidez oral al tiempo que aumenta la motivación o la costumbre de hablar euskera y se amplían las redes sociales euskaldunes. "Es una buena manera de superar la vergüenza de hablar ante gente desconocida y ganar seguridad", explica Naroa Cuesta, una de las responsables del programa.
Desde que se puso en marcha la iniciativa en 2007, el número de participantes se ha triplicado hasta llegar a las 663 inscripciones y 90 grupos, que se alcanzaron el año pasado. Muchos son alumnos de los euskaltegis o de la Escuela Oficial de Idiomas de Vitoria que necesitan obtener la titulación y buscan una mayor destreza comunicativa. Otros simplemente desean practicar para recordar lo aprendido en el pasado. "En definitiva, se trata de salir de las clases y llevar el euskera a la calle", asegura Cuesta.
El plazo para matricularse en el programa Mintzalaguna se prolongará hasta este día 15, por lo que todavía es posible sumarse a la iniciativa. La campaña de captación de participantes sigue abierta con un reto añadido, el de calar en la población más joven. La pasada primavera echó a andar la variante más reciente de Mintzalaguna, Gaztelaguna, dirigida a gente de entre 18 y 28 años, ya que a juicio de los organizadores, en la normalización del euskera componen "un público objetivo clave". La dinámica es la misma pero cuidando especialmente los intervalos de edad a la hora de crear los grupos. En esta primera convocatoria se apuntaron un total de 40 personas, una cifra más baja de la esperada inicialmente, de ahí que este año mantengan el llamamiento con mayor insistencia aún.
Otra de las modalidades del programa es Gurasolaguna, dirigida a padres y madres de un centro educativo. Ésta busca incidir directamente en las costumbres lingüísticas de cada hogar. Normalmente, los encuentros se adecuan a los horarios en las escuelas e institutos y las reuniones se realizan en torno a los mismos. A día de hoy, el programa se desarrolla en un total de 17 centros escolares de la capital alavesa como son Armentia, Olabide, Arantzabela, Adurtza, Toki Eder, Koldo Mitxelena, Umandi, Sagrado Corazón-Carmelitas, Barrutia, Miguel de Unamuno, Ibaiondo, Zabalgana, Ikasbidea, Odon de Apraiz, Jesús Obrero, Mendebaldea y Luis Elejalde. En este sentido, desde la organización recuerdan que "la transmisión generacional del euskera es un reto" en el que el compromiso de las familias resulta indispensable.
encuentro en murgia Además de las reuniones semanales, dentro de Mintzalaguna organizan actividades complementarias con el fin de afianzar las relaciones entre los diversos grupos. La primera actividad de este curso será el 20 de octubre en Murgia, donde tendrá lugar Arabako Mintza Eguna. La localidad alavesa se convertirá en punto de encuentro de euskaldunes que participarán conjuntamente en distintas actividades como una visita guiada mitológica, juegos, conciertos y dantzas. Los interesados podrán inscribirse hasta el próximo día 16. Las hojas de inscripción para Mintzalaguna, por su parte, se pueden encontrar en los euskaltegis, Escuela Oficial de Idiomas y centros cívicos.