Araia. En el Artzain Eguna de Araia no sólo triunfan los vencedores en el concurso de queso Idiazabal. Ganan los responsables de los puestos, que hacen cajas nada desdeñables; los expositores, que difunden y perpetúan su saber hacer; los visitantes, que siempre disfrutan de una jornada memorable y, por supuesto, el municipio, que aprovecha la oportunidad que le brinda la jornada para darse a conocer. En la edición de 2012 volvieron a repetirse todos estos factores y uno añadido, el climatológico, que vino a alegrar los rostros de los vendedores. Muchos de los asistentes que aguardaron hasta el último momento antes de decidir si se escaparían a la playa, al pantano o de excursión al monte, se decidieron finalmente por Araia nada más caer las primeras gotas. Afortunadamente, la lluvia no acabó de romper y la temperatura fue perfecta para callejear, disfrutar del queso, admirar el contenido de los tenderetes y dejarse llevar por la música y los espectáculos.

Antes de comenzar el recorrido, mientras se ultimaban los detalles en la plaza para comenzar las exhibiciones de herri-kirolak, una extensa cola comenzaba a formarse frente al stand en el que se repartían, de forma gratuita, cuñas de queso, pan y vino o sidra, a elegir. Bien avituallados, los visitantes volvían a descender por la calle deteniéndose en los puestos.

En el escenario principal, al filo de las 12.00 horas, dio comienzo el trofeo Andra Mari del concurso de queso Idiazabal. 23 productores respondieron a la convocatoria. Diez alaveses, uno vizcaíno, seis guipuzcoanos y seis navarros, todos ellos pastores con rebaño propio de oveja latxa o carranzana. Entre los miembros del jurado, Carmen de Vega, habitual en este tipo de certámenes, estudiosa del queso y profesora de farmacia de la UPV; Leticia Plágaro, integrante de La Cocina de Plágaro; Joserra Agiriano, cocinero y catador; Benjamin Urdiain, primer chef que logró tres estrellas Michelín en el Estado al frente del restaurante madrileño Zalacaín; Fermín Leizaola, presidente de Etnología de la Sociedad de Ciencias Aranzadi; Anjel Alkain, actor de ETB y José Luis Berzal, bodeguero de Baños de Ebro. El grupo se completó con personas destacadas del ámbito local como Andoni Berriozar, Jesús María Gil de San Vicente y Javi López de la Calle. Este año, por primera vez, se invitó a la cata a un productor de vino de Rioja Alavesa para, como señalaron desde la organización, reforzar el valor del maridaje de dos productos de primera calidad.

Mientras el jurado deliberaba, en la plaza tenía lugar un enfrentamiento de aizkolaris. Un desafío en el que los contendientes, Arkaitz Jauregi, de 28 años, y Eloy Corchero, de 18, reprodujeron los enfrentamientos de los carboneros del siglo XIX. Al final se impuso la veteranía de Jauregi, pese a que para compensar cortó diez troncos y su oponente ocho. Lo logró en 26 minutos 53 segundos, mientras que Corchero necesitó 57 segundos más. A continuación, Oscar Sáez de Castillo hizo girar sobre su eje un carro de 200 kilos de peso a lo largo de nada menos que tres vueltas completas.

De vuelta en el escenario, los bertsolaris Oier Arbina, de Agurain, Eneko Lazkoz, de Etxarri Aranaz, y Egoitz Aizpuru, fueron los encargados de dar a conocer con sus rimas el nombre de los galardonados en la presente edición del concurso de Idiazabal. El tercer premio recayó en Aizpea Gaztandegia, de Olaberria, el segundo fue a parar al caserío Mauxitxa de Elgoibar y el ganador del certamen fue el navarro Ricardo Remiro, de Eulate. En cuanto al vencedor del premio local, la quesería La Leze de Ilarduia se impuso al resto. Los tres primeros clasificados obtuvieron premios en metálico de 300, 200 y 100 euros, además de un trofeo y, por primera vez, una botella magnum de un vino de autor "selección privada" de Dominio Berzal procedente de viñas centenarias.