Vitoria. Dentro de un contexto dramático para el sector debido a la crisis económica, los comerciantes de Gasteiz tiran de ingenio para salir a flote y miran al futuro cercano con un moderado optimismo. A pesar de que el entorno no ayuda en absoluto a animar el consumo, con informaciones diarias cargadas de negatividad, esta primera mitad de 2012 que ya encara su recta final ha ofrecido ciertos síntomas de recuperación en el comercio minorista vitoriano. La apertura de la campaña estival de rebajas en apenas una semana supondrá un acicate adicional para el sector, que sin duda volverá a echar el resto. "La campaña empezará con mucha fuerza. Somos optimistas", advierte el presidente de la Asociación de Comerciantes de la calle Gorbea, Víctor Manuel Ibáñez. "Es el empujoncito que todos estamos esperando", añade su compañero de vía, José Antonio Landeras, miembro de la junta de este colectivo.

El año no comenzó nada bien en Gorbea, uno de los ejes comerciales más importantes de la capital alavesa. Nada menos que ocho comercios se vieron obligados a echar la persiana a comienzos de enero, lo que extendió el pesimismo a lo largo y ancho de la céntrica calle. Sin embargo, esas mismas lonjas han comenzado a recuperar progresivamente la vida con el paso de los meses gracias a la apertura de otros tantos comercios de nuevo cuño. Una peluquería, una tienda de moda, otra de telas, otra de cosméticos... "Es un proceso que tenía que pasar. Hay zonas que han aguantado menos, porque tienen un comercio más obsoleto, pero aquí hay gente muy profesional y preparada. Seguimos estando en una zona comercial privilegiada, aunque siga notándose la la crisis, por supuesto", ilustra Ibáñez. Landeras también habla de "recuperación" en Gorbea, una circunstancia que "da alegría" y "anima a seguir trabajando".

Las cifras de ventas oscilan por barrios, pero todos los representantes del sector consultados por este periódico coinciden en apuntar que aún están "lejos de alcanzar los buenos tiempos". En Zaramaga, por ejemplo, las transacciones se han incrementado de forma considerable este año respecto al anterior, según ha cuantificado el presidente de su Asociación de Comerciantes, José González. Un interesante 8%. Pese a todo, González recuerda que los comercios del barrio venían "de un descenso muy fuerte" de las ventas, acaecido en 2010, y que en 2011 no remontó. González también advierte de que en junio se ha producido "un frenazo" en el consumo, lo que le empuja a ser todavía más prudente.

Entretanto, la presidenta del colectivo de comerciantes Gasteiz On, Conchi Aguirre, también significa un aumento destacable de las ventas esta primavera en el sector textil, empujadas por la proliferación de comuniones y bodas, una buena noticia que, por contra, no traslada al comercio de hogar. "Es lo que más está sufriendo", remarca Aguirre. La presidenta de Gasteiz On pone énfasis en una tendencia que ha comenzado a extenderse en el entorno de la Avenida Gasteiz y la propia Gorbea, la apertura progresiva de numerosas tiendas de alimentación -especialmente fruterías- en lonjas que antes albergaban oficinas bancarias. "Esto es un buen empujón para el pequeño comercio", celebra. En esa misma línea, González también ha detectado en Zaramaga un incremento del consumo en las tiendas de alimentación de barrio, en detrimento de las grandes superficies. "A los carniceros, fruteros o pescateros no les ha ido mal, aunque sí se ha dado una variación en el consumo, hacia productos más baratos", expone.

Para capear el temporal, los comerciantes se han tenido que reinventar hasta convertirse en verdaderos expertos en marketing. Las iniciativas proliferan, desde las campañas de agresivos descuentos fuera de las temporadas de rebajas hasta estrategias más puntuales como ofrecer el género libre de IVA. "No somos elefantes como los grandes comercios, y por eso podemos poner todo patas arriba en tres días", argumenta Ibáñez. En Gorbea, por ejemplo, esta próxima semana previa a las rebajas será "extraordinaria" y se ofrecerán ofertas especiales en todos los comercios.

Mensajes positivos Los profesionales coinciden también en apuntar que el "miedo" a un futuro todavía peor sigue atenazando a muchos de sus clientes. Hay dinero, pero también un componente psicológico bastante pernicioso. "Las malas noticias no benefician a nadie. Los políticos deberían difundir alegría y optimismo, porque la gente se retrae y no gasta. Muchos piensan hoy tengo, pero mañana no lo sé", analiza Landeras. José González, por su parte, exige a la clase política "claridad" para conocer el estado real de la economía. "Necesitamos saber dónde estamos, si esto ha terminado ya, y a partir de ahí comenzar a construir. La gente tiene dinero, pero estos terremotos no benefician", asegura.

Aguirre, quien califica esta crisis como la más grave de las que ha sufrido, recuerda que el sector "está muy acostumbrado a luchar y aguantar" a pesar de que sigue "sin estar en el mejor momento". La presidenta de Gasteiz On lanza un mensaje optimista, el mismo que a su juicio debería endulzar muchas declaraciones políticas. "Soy positiva, porque mucho más fondo ya no podemos tocar. Estoy bastante informada y esto no tardará en pasar", sentencia.