WASHIGNTON. "Hemos visto informaciones sobre que el régimen de Al Assad había comenzado a replegar los soldados y sus fuerzas militares de las ciudades sirias y las áreas civiles. Os facilitamos algunas imágenes que ilustran nuestras conclusiones sobre este aspecto", sentencia Ford.

En primera instancia, Ford destaca que "el Gobierno sirio ha retirado algunas fuerzas", como en la localidad de Dael, en la provincia de Daraa (norte) y en Taftanaz, en la provincia de Idlib (noroeste), "después de varios días de ataques contra dichas ciudades".

Sin embargo, el embajador de Estados Unidos en Siria, ahora en Washington, después de que fuera retirado a causa del recrudecimiento de la violencia en el país, denuncia que las autoridades "simplemente han movido algunos vehículos armados" fuera de la localidad de Zirdana, próxima a Taftanaz.

Máxime, en Homs (oeste) y Zabadani (suroeste), Ford indica que "el Gobierno sirio mantiene sus unidades de artillería cerca de las áreas residenciales, desde donde pueden efectuar disparos sobre ellas". El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, precisamente, ha condenado este sábado la escalada de la violencia de los últimos días, cuyo saldo mortal se eleva a más de 150 víctimas, según la oposición, y ha sostenido que Siria está violando el pacto auspiciado por Annan al no replegar sus tropas de los núcleos urbanos.

"En ausencia de periodistas independientes", recalca Ford, "Estados Unidos y otros gobiernos tienen otros medios, incluidos los satélites que tomaron dichas imágenes, para verificar el compromiso del régimen o la falta de él". "El régimen y el pueblo sirio han de saber que les estamos viendo. El régimen no puede esconder la verdad. Urgimos fuertemente al régimen de Al Assad a que permita la entrada de una misión de observadores de la ONU para realizar unas labores efectivas e independientes de verificación", apostilla Ford en este link (https://www.facebook.com/notes/us-embassy-damascus/a-message-from-ambassador-ford/10150655544736938).

El pasado jueves, el Consejo de Seguridad de la ONU consensuó por primera vez apoyar el plan de Annan que, entre otras cosas, exige el cese inmediato de toda la violencia y la vulneración de los derechos fundamentales, facilite el acceso de ayuda humanitaria y una transición política, así como un repliegue de las tropas y de las milicias gubernamentales como las 'shabiha' con fecha límite el 10 de abril