MADRID. Según han informado fuentes socialistas, Zapatero también ha dejado claro que la dirección del PSOE va a garantizar que todos los aspirantes a la Secretaría General compitan en "igualdad" de condiciones y se ha mostrado convencido de que, como ha ocurrido siempre, el cónclave, que tendrá lugar en Sevilla, saldrá "bien", tanto para España como para el partido.

Zapatero ha reclamado a sus compañeros que, durante el debate precongreual, tengan presentes los servicios que desde el PSOE se han prestado siempre al país y ha reclamado a sus compañeros que, en estos momentos de crisis, hagan un congreso "al servicio de la sociedad española" sin "aislarse" ni olvidar que la situación que atraviesa el país es muy difícil.

El expresidente del Gobierno ha tenido una intervención muy breve, que no ha llegado al cuarto de hora, pero que, según el mismo ha explicado, era "obligada" puesto que es la última vez que participa como líder de partido en una reunión de máximo órgano entre congresos. Por eso, ha aprovechado para despedirse del Comité Federal, señalando que se queda con una sensación de "afecto y confianza" de todos los militantes.

"Toda mi gratitud, porque habéis sido especialmente generosos conmigo al apoyar mi gestión de estos ocho años y también al saber perdonar mis errores", les ha agradecido, antes de dejarles claro que siempre escucharán "palabras de afecto" de su boca y que siempre será "compañero" de todos. ORGULLO DE PARTIDO

A partir de ahí, ha hecho algunas reflexiones sobre cómo debe ser, desde su punto de vista, el debate previo a la cita de Sevilla. En primer lugar ha hecho un llamamiento a que todos compartan la confianza que él mismo tiene en el partido. "Los congresos en el PSOE salen bien para España y para el partido y estoy seguro de que así será también con el 38 Congreso", ha comentado.

A su juicio, lo lógico es que en el escaso mes que resta para que los socialistas elijan nuevo líder se haga "autocrítica", pero siempre desde el "orgullo" y el reconocimiento a lo que el PSOE ha hecho por España.

El papel de la socialdemocracia en esta etapa convulsa también debe tener hueco en las reflexiones de dirigentes y militantes y los candidatos han de tener un comportamiento "ejemplar". En este punto, se ha mostrado convencido de que todos los aspirantes mantendrán esa actitud y de que la dirección garantizará que ambos concurran en condiciones de "igualdad".

"Facilitaremos la libre elección en el congreso", ha apuntado, mostrando su confianza en que su sucesor cuente con el mismo respaldo que él ha tenido durante su etapa al frente del partido.

NO HAY QUE AISLARSE

No obstante también ha hecho una advertencia: "Más allá de debates internos o sobre el funcionamiento del partido, debe ser un congreso al servicio de la sociedad española", ha avisado el todavía secretario general, recomendando a sus compañeros que no se aíslen y, sobre todo, que tengan presente la complicada situación que vive España.

Y es que, según Zapatero, tras la llegada del PP al Gobierno, lejos de haberse producido una mejora, sigue habiendo síntomas muy preocupantes y esa debe ser la principal preocupación de los socialistas.