MADRID. El presidente delEBB del PNV, Iñigo Urkullu, ha asegurado hoy que confía en la "inteligencia" y la "prudencia" del candidato del PP, Mariano Rajoy, para que, si es elegido presidente del Gobierno, "arrime el hombro" para lograr la concordia en la sociedad vasca y no ceda a las presiones para ilegalizar Bildu.
Urkullu ha hecho estas consideraciones en un desayuno informativo de Nueva Economía Fórum, en el que ha advertido al próximo Ejecutivo de que el "pretexto de un ahorro económico para diluir el estado autonómico no puede incluir a Euskadi en el mismo cedazo".
Se ha referido a las reuniones que ha mantenido, tanto públicas como privadas, con el líder de la oposición que ha enmarcado "en la normalidad absoluta" porque "con Rajoy no hay ningún tapujo", y ha hecho hincapié en la necesidad de que el próximo Gobierno atienda a la situación económica e institucional de España "con la necesidad de un consenso amplio" con el resto de partidos.
En ese sentido, Urkullu ha mostrado la disposición del PNV a alcanzar acuerdos para la salida de la crisis, el avance en el autogobierno y la paz y la normalización en el País Vasco.
Ha destacado que el anuncio de ETA de que cesa definitivamente en la actividad armada es "la mayor conquista cívica" de su generación y ha hecho un "reconocimiento público" al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, por su "tenacidad y compromiso a la hora de poner fin a tantos años de violencia terrorista", así como por su "disposición pese a las frustraciones sufridas".
Ha expresado asimismo su "respeto y agradecimiento" a Rajoy "por la prudencia y responsabilidad demostradas ante el momento histórico que estamos viviendo".
"Reconozco su esfuerzo para abstenerse del interés electoral para alejarse de las fuertes presiones que han pretendido influenciarle. El camino que entre todos debemos construir sigue expedito", ha manifestado.
Ha mostrado su "esperanza" en que llegue el día en que "quienes han hecho de la muerte su causa, comparezcan públicamente para asumir las consecuencias de su locura" y ha añadido que "el tiempo del desarme efectivo" de ETA "también llegará" y que el PNV seguirá siendo "exigente con ese mundo que se emancipa de la violencia".
Ha rendido tributo a las víctimas de ETA -"Jamás permitiré, y como yo la mayoría social y política de Euskadi, que su ejemplo quede en el olvido, jamás", ha manifestado- y ha dicho que uno de los "consuelos de hoy es que mañana ya no habrá más".
Preguntado por la petición de la izquierda abertzale para que se reconozca a las víctimas "de todas las partes", Urkullu ha respondido que "lo que más le duele es que haya sido el representante de EA quien haya dicho estas cosas".
Tras recordar que existe una ponencia en el Parlamento vasco sobre víctimas policiales y de motivación política, ha subrayado que "llevarlas a un nivel de semejanza, similitud, paralelismo, compensación o contraposición" con las víctimas del terrorismo de ETA "es un error" y "está fuera de todo lugar".
Respecto a las elecciones generales, ha afirmado que el PNV no contempla "otra posibilidad que contar con grupo parlamentario propio en las Cortes" y ha mostrado su disposición a acordar pactos que ayuden a España a salir de la crisis económica.
Sin embargo y ante la posibilidad de que "alguien pueda tener la tentación de reconducir" el modelo autonómico y convertir el "café para todos" en "disolución para todos", Urkullu ha advertido que no admitirá que "se pretenda diluir el autogobierno vasco en un nuevo mapa de sano regionalismo".
