valencia. El PP cumplió con el guión previsto y ayer, a través de su dirección nacional, hizo oficial, entre otras, la candidatura de Francisco Camps para presidir de nuevo la Comunidad Valenciana. Con esta decisión la cúpula popular y su presidente, Mariano Rajoy, obvian la acusación de cohecho impropio que pesa sobre el aún presidente valenciano en el denominado caso de los trajes (una pieza aneja al caso Gürtel) y le ponen de nuevo al frente de las listas en aquella comunidad. Y además lo hacen sin tapujos. El propio Rajoy salió ayer al paso de esta decisión sacando pecho al recordar que "dije hace seis meses que Camps sería el candidato pero nadie me creyó". Lo que dijo, se cumple ahora.

Por su parte Camps aseguró que "esperaba" la decisión de la cúpula del partido y que la ha recibido con la "sensación de una enorme emoción y responsabilidad". Camps hizo estas declaraciones en Murcia acompañado por su homólogo Ramón Luis Valcárcel, cuya candidatura a las autonómicas del 22 de mayo también ha sido aprobada por la dirección del PP.

El presidente de la Generalitat Valenciana añadió que en estos últimos años como presidente autonómico sólo ha pretendido "servir a los valencianos y, con lealtad, a todos los españoles", y recordó que es la tercera vez que se presenta a la presidencia de la Generalitat. Camps resaltó "el valor especial" que para él tiene esta nominación y lo adornó diciendo que es "el más alto honor".

Por su parte, Valcárcel comentó que no le había sorprendido que se ratificara la designación de su compañero puesto que "era lo esperado".

Camps había viajado a Murcia acompañado del vicepresidente tercero del gobierno valenciano, el consejero de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, Juan Cotino, con quién ha participado en la reunión del patronato del Instituto Euromediterráneo del Agua.

oposición La noticia sí cogió en Valencia a los responsables de la oposición que coincidieron en señalar que la ratificación de Camps como el candidato popular a presidir la comunidad demuestra el "poco compromiso del PP con la ética". En clave política tanto el PSPV como IU interpretan que la decisión adoptada ayer viene a ratificar que Rajoy ha cedido a las presiones de Camps y que no ha sabido imponerse. La portavoz adjunta del grupo parlamentario Compromís, Mónica Oltra, fue un poco más allá y sentenció que la confirmación de Camps demuestra que el PP nacional "cede ante los chantajes".