RABAT. Una multitudinaria manifestación se ha concentrado frente a la sede del Parlamento marroquí para reivindicar "democracia, libertad, y dignidad", según constató Efe.
La marcha, que había comenzado a las 10.00 hora local (misma hora GMT), fue recibiendo paulatinamente la incorporación de centenares de personas hasta superar los 10.000 integrantes, según fuentes de la organizción, aunque fuentes oficiales redujeron esa cifra a 1.000.
La aparición del sol y del buen tiempo tras la lluvia inicial empujó a numerosas familias y a jóvenes rabatíes a unirse a la manifestación, convocada por un grupo de jóvenes a través de la red social Facebook.
Uno de ellos, Maruan Mahibba, explicó a Efe que "esto es solo el inicio de nuestras protestas. Creemos que el país necesita una profunda transformación y hasta ahora no hemos visto ninguna voluntad de llevarla a cabo".
La misma opinión la compartía el vicepresidente de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos, Abdelhamid Amin, para quien el objetivo principal de la protesta es "una Constitución nueva, ya que la actual no es democrática".
"No creo que una sola manifestación sea capaz de arreglar un problema que se remonta a hace siglos", añadió Amin.
Los manifestantes agitan banderas marroquíes, entonan el himno tunecino (en honor a la revolución de ese país) y dirigen sus principales invectivas contra los consejeros del rey, como Munir Majidi, y contra otras personas cercanas a él, como Fuad Ali El Himma, fundador del Partido Autenticidad y Modernidad (PAM).
En el abarrotado bulevar Mohamed V, frente al Parlamento, predomina un ambiente festivo y reivindicativo, y no se han registrado incidentes hasta el momento.
Sin embargo, un portavoz del grupo islamista Al ADL Wal Ihsan, Hasan Benajeh, dijo a Efe que varios integrantes de su organización y otros ciudadanos marroquíes procedentes de localidades cercanas a Rabat sufrieron el acoso policial cuando se dirigían a la protesta".
Según Benajeh, "la policía identificó a parte de estas personas e intentó impedir su entrada en la ciudad obligándolas a regresar por donde habían venido".
Por otra parte, algunas personas se han acercado hasta ese lugar también para defender el actual sistema político, como la comerciante Halima Aschur, de 33 años, para quien "el rey trabaja mucho por Marruecos, pero no tiene una varita mágica".
"Es un rey impecable, no creo que la solución sea cambiar la constitución y quitarle poderes", agregó Aschur.
La manifestación de Rabat es la más numerosa de las convocadas hoy en todo Marruecos, en la primera jornada de protestas tras el estallido de las revueltas árabes que han acabado con los regímenes de los presidentes egipcio, Hosni Mubarak, y tunecino, Zine El Abidine Ben Alí.