PEKÍN. La agencia oficial de noticias Xinhua difundió hoy un informe que señala que además dos niños permanecen desaparecidos en la ciudad de Laibin.
En la comarca de Xincheng, unos 700 estudiantes y el personal de la escuela secundaria Beigeng han quedado atrapados por las inundaciones, ya que el agua alcanza una altura de 1,5 metros en la primera planta del edificio de cuatro que constituye la escuela.
"El agua entró en el campus en la mañana de ayer. Ahora los estudiantes están durmiendo dentro de los edificios de la escuela, en un piso superior, y siguen asistiendo a clases", señaló el responsable del centro, Qin Shuhai, a Xinhua.
El agua ha cortado el suministro de electricidad y agua del centro escolar, donde empiezan a escasear los alimentos, por lo que los equipos de rescate están intentando hacer llegar estos suministros a los afectados mediante lanchas neumáticas.
En la misma ciudad, 65 centros escolares han quedado inundados, aunque la mayoría de estudiantes pudieron ser evacuados.
Los corrimientos de tierra y barro provocados por las lluvias torrenciales han dejado hasta hoy 20 muertos y 27 desaparecidos en esta región fronteriza con Vietnam, según el último informe de los equipos de rescate.
Xinhua indica además que más de 66.000 personas han tenido que ser evacuadas por unas lluvias que hasta hoy han dejado pérdidas económicas directas de 87,84 millones de dólares.
Los equipos de rescate todavía están intentando localizar por lo menos a 27 personas que quedaron sepultadas por el barro en las ciudades de Wuzhou y Yulin, en el sur del país asiático y en una región fronteriza con Vietnam.
La administración regional de Tierra y Recursos indica que las intensas lluvias empezaron a asolar la zona y a provocar avalanchas que han dejado 7 muertos en Wuzhou y otros 13 en Yulin.
En la mañana de hoy las tormentas afectaba a 19 comarcas bajo la jurisdicción de 7 ciudades, donde 3.260 viviendas y 103.450 hectáreas de cultivos se han visto dañados.
El país asiático, especialmente su mitad sur, sufre cada año numerosos desastres naturales tales como inundaciones y tifones durante su temporada de lluvias, que suele iniciarse en mayo y finalizar en septiembre u octubre.
Cientos de personas mueren anualmente en estas catástrofes, y en el peor año de inundaciones de las últimas décadas, 1998, fallecieron más de 3.000 chinos debido a las crecidas en los ríos Yangtsé y Songhua (noreste).
