Los investigadores de la Ertzaintza intuyeron que aquello que decía el recién detenido no podía ser cierto. Gritaba y se reconocía autor de diferentes barbaridades que, de primeras, no tenían mucho sentido. Junto a su coche detenido en la Avenida Gasteiz por los agentes tras una persecución de película desde Laredo (Cantabria), el protagonista del suceso de este jueves mostraba signos de no encontrarse en la mejor condición psicológica.

En cualquier caso, los ertzainas decidieron comprobar los hechos que el citado decía haber hecho. Todo falso. No obstante, y dadas las circunstancias, tal y como han indicado agentes consultados por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, el arrestado ha sido evacuado al Hospital de Txagorritxu para comprobar su estado mental.

Revisión facultativa

"Decía un montón de incongruencias y de burradas. Parece ser una persona con algún tipo de trastorno", ha indicado a este periódico el citado investigador de la Policía autonómica.

"Decía un montón de incongruencias y de burradas. Parece ser una persona con algún tipo de trastorno", ha indicado a este periódico el citado investigador de la Policía autonómica

Eran alrededor de las ocho y media de la mañana cuando los vecinos del tramo de la Avenida entre la calle Chile y Beato Tomás de Zumárraga se veían sobresaltados por los sonidos de las sirenas de los coches de la Ertzaintza y de la Policía Local de Vitoria.

En cuestión de segundos hasta cuatro coches patrulla de la policía vasca tomaban la zona tras dar el alto a un turismo para proceder a su registro tras haberse saltado dos cotroles de tráfico y huir hasta llegar a la capital alavesa. Según testigos presenciales hasta ocho agentes de la Ertzaintza han procedido a inmovilizar al conductor del vehículo interceptado.

La intervención provocaba el corte del tráfico en sentido hacia portal de Castilla con la colaboración de patrullas de la Policía Local A.C.S.

Tráfico cortado en hora punta

La intervención provocaba el corte del tráfico en sentido hacia portal de Castilla con la colaboración de patrullas de la Policía Local que pasaban a regular el tráfico desviándolo hacia la calle Badaia. Al menos durante veinte minutos quedaba cortado el tráfico en una de las arterias principales de la ciudad en uno de los horarios de mayor circulación a primeras horas de la jornada.

Eran alrededor de las ocho y media de la mañana cuando los vecinos del tramo de la avenida entre la calle Chile y Beato Tomás de Zumárraga se veían sobresaltados por los sonidos de las sirenas de los coches de la Ertzaintza DNA

El vehículo registrado ha inmovilizado en uno de los carriles de circulación rodeado de varios coches de la Ertzaintza y una furgoneta del cuerpo autonómico cortaba el paso en la acera durante unos minutos provocando que ese tramo de la calle quedara parcialmente acotado para garantizar la seguridad de la intervención policial.

Minutos antes de las nueve de la mañana quedaba restablecida la circulación y la normalidad en esta céntrica calle al finalizar la intervención.

Huyendo desde Cantabria

Fuentes del Departamento de Seguridad han confirmado que la actuación policial se ha puesto en marcha para detener al conductor de un vehículo que se había saltado al menos dos controles policiales y que huía de los cuerpos de seguridad desde Cantabria.

En un primer incidente el conductor finalmente detenido no se ha paradonte un control de tráfico de la Guardia Civil en tierras cántabras dándose a la fuga.

Ya en carreteras vascas ha sido la Ertzaintza la que ha intentado detener al turismo siguiéndolo desde el peaje de Altube en dirección a la capital alavesa.

A la altura de Portal de Foronda el conductor del coche ha hecho caso omiso a las indicaciones de la Ertzaintza para que detuviera la marcha en un segundo control.

Finalmente ha sido interceptado a en la Avenida Gasteiz en un operativo en el que los agentes han tenido que emplear el uso de la fuerza para detener al hombre procediendo a romper las lunas del coche para sacarlo del interior del del vehículo.

El detenido está acusado de sendos delitos de conducción temeraria y de atentado contra los agentes de la autoridad por hacer caso omiso de sus indicaciones.