Tras conquistar a más de 500.00 espectadores en toda Europa, Luminiscence aterriza en Donostia con una propuesta única que convierte a la Catedral del Buen Pastor desde el 30 de mayo en un auténtico templo de luz, música y emoción.
Patrimonio, arte digital y tecnología se dan de la mano en este espectáculo 360°, que se ha convertido en una de las experiencias inmersivas más impactantes de la actualidad.
Creado por Lotchi y producido por Banijay Iberia, este espectáculo audiovisual transforma espacios arquitectónicos emblemáticos en escenarios vivos, fusionando video mapping, música envolvente y narrativa visual para ofrecer un viaje sensorial sin precedentes, cuyas entradas ya están disponibles en Fever.
Luminiscence conecta el pasado con el presente, las proyecciones con la música en vivo, y la tecnología con la tradición, transformando el espacio en una experiencia inmersiva única.
Después de su éxito en ciudades como Burdeos, París, Lille, Lyon, Reims y Ruan, este espectáculo llega al corazón de Donostia eligiendo como escenario la majestuosa Catedral del Buen Pastor.
Inspirada en las grandes catedrales góticas de Europa, esta iglesia neogótica, erigida a finales del siglo XIX, impresiona por su estilizada aguja de 75 metros. Situada entre el mar y las montañas, es testigo del renacimiento arquitectónico de la Belle Époque.
Gracias a un sistema de altavoces que rodea al público, cada nota, cada voz y cada percusión de la música en vivo viaja a través del edificio para ofrecer una inmersión sonora sin precedentes. Esta inmersión total, unida a la acústica natural del lugar, transforma la escucha en una experiencia sensorial inédita, donde el sonido se convierte en materia y movimiento.
PATRIMONIO
Luminiscence ha sido creado por Lotchi y producido por Banijay Iberia, por lo que como indica el confundador del primero, Romain Sarfati: “Nuestra misión es preservar, transmitir y promover nuestra historia y nuestro patrimonio, poniendo en valor lugares emblemáticos que forman parte de nuestro legado común. Estamos orgullosos de ofrecer una experiencia artística, inmersiva e inclusiva que permite al mayor número de personas descubrir la riqueza de nuestro patrimonio, sin importar su edad, cultura, nacionalidad o religión”.
Este espectáculo se divide en cuatro actos, entre los que encontramos:
‘La elevación de una quimera’
Durante siglos de prosperidad, Donostia se desarrolla como un puerto comercial, pero, tras las destrucciones napoleónicas, la ciudad debe reinventarse. Convertida en una ciudad balnearia real, se lanza un ambicioso proyecto de urbanismo moderno y, para coronar esta visión, se construye una iglesia grandiosa y nueva, directamente inspirada en la Edad Media.
‘Luces y resplandores’
Desde esta orilla del mar que ha hecho famosa a la ciudad, la luz del sol hace brillar las vidrieras de la nueva iglesia y da vida a su piedra. Frente a los tumultos de la historia, se alza como guardiana de Euskadi.
‘El eco de los tiempos’
Para honrar esta vocación, se convierte en catedral. Su sorprendente silueta medieval hace resonar el eco de las glorias pasadas, mientras se transforma en un verdadero espectáculo musical.
‘Eternizar’
La joven catedral continúa su epopeya y mira hacia el futuro. Aunque inspirada en el pasado, está construida para el porvenir y encarna un símbolo de unión: la audaz fusión entre herencia e innovación.
