Tras la Lotería de Navidad, uno de los sorteos más famosos es el de la Lotería del Niño, que se celebra el Día de Reyes, es decir, el 6 de enero de 2022, con el que se reparten 700 millones de euros en premios.
En comparación con el sorteo de la Lotería de Navidad, que es el que más participación consigue, la tributación por los premios es menor, lo cual es debido a que la cantidad que se puede ganar en este último también es menor. Al contrario, para el ciudadano supone que tenga que pagar menos dinero a Hacienda si ha sido agraciado con uno de los premios importantes.
La legislación establece desde el 1 de enero de 2020 que quedan sujetos a impuestos todos los premios que superen los 40.000 euros, estando esta cantidad exenta en todos los premios. El resto de cantidades que superen esa cifra, tributan un 20%.
De este modo, por cada décimo de la Lotería del Niño, que cuesta 20 euros, se pueden ganar tres premios principales:
El primer premio son 2 millones de euros a la serie; es decir, 200.000 euros al décimo.
El segundo premio son 750.000 euros por serie, por lo que toca 75.000 euros por décimo.
El tercer premio son 250.000 euros por serie, o lo que es lo mismo 25.000 euros por décimo.
De este modo, solamente hay dos premios que tributan en Hacienda, el primero y el segundo, ya que el resto no superan los 40.000 euros por décimo. Todo lo contrario pasa en la Lotería de Navidad, donde tributan los tres primeros premios que, además, son más cuantiosos (400.000 euros, 125.000 euros y 50.000 euros al décimo, respectivamente).
Así, del primer premio de la Lotería del Niño, Hacienda se llevaría 32.000 euros y el ganador 168.000 euros. En cambio, en el de la Lotería de Navidad, el fisco se lleva 72.000 euros y el ganador 328.000 euros.
En el caso del segundo premio de la Lotería del Niño, Hacienda se llevaría 7.000 euros y el ganador un premio de 68.000 euros, mientras que con el segundo premio de la lotería de Navidad, Hacienda se lleva 17.000 euros y el ganador 108.000 euros.
En el resto de premios de Lotería del Niño, Hacienda no se lleva ningún porcentaje porque no superan los 40.000 euros, por eso es que este sorteo tributa en menor medida y los afortunados con uno de los grandes premios pagan menos al fisco.