Joaquín Sabina suele hablar claro. Con lo que lleva vivido no se muerde la lengua; se lo puede permitir. Por eso ha afirmado contundentemente que no volverá a los escenarios "mientras que la gente esté con mascarilla y no pueda levantarse a fumar o tomar una copa", un tiempo que ha calculado en torno al "año y medio" sobre todo al pensar en Latinoamérica.
Así lo ha expresado este martes el cantante (Úbeda, Jaén, 1949) tras dejar en la caja de seguridad número 1237 de la cámara acorazada del Instituto Cervantes de Madrid la colección completa de la revista literaria argentina Sur (1931-1992), así como un bombín, y algunos manuscritos, dibujos y fotos personales. "No pienso volver a los escenarios mientras la gente esté con mascarilla o no pueda levantarse o fumar o tomar una copa y me temo, sobre todo en Latinoamérica, que no será hasta dentro de un año y medio. Pero sí volveré a decir hola y adiós", ha expresado el también bibliófilo, como ha dado a conocer al legar la colección de la revista argentina.
Además, durante este acto, finalizado con una lectura al alimón con el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, del texto que hicieron para el Congreso de la Lengua de Córdoba (Argentina), ha dicho que se encuentra "bien" sobre todo por "haber sobrevivido a estas maldades que nos han asolado". "No he tenido covid, me he portado como un ciudadano ejemplar, he seguido fumando y bebiendo y me siento bien", ha manifestado.
Además, el cantante ha contado durante el encuentro que ha mantenido con Benjamín Prado y Nativel Preciado tras dejar su legado que en la actualidad sí que piensa en el dinero por una "cuestión de "edad" y por esa "cosa burguesa" de asegurarle a sus hijas el futuro. "A mí el dinero nunca me ha importado nada, me servía para que mis amigos pudieran ir a donde no podían o para que cenaran en los restaurantes que no podían. Así que lo despilfarré regalándoselo a mis amigos y pasándolo muy bien", ha concluido.