madrid - El presentador y aventurero Jesús Calleja vuelve este domingo a la televisión con la cuarta temporada de Volando voy, que este año hará misiones “mucho más potentes y colectivas” para denunciar la despoblación rural “masiva” porque “no sabemos lo que ocurre en los pueblos”.
Las Hurdes (Cáceres), el Parque Natural de Redes (Asturias), Penelles (Lleida), la Sierra de Aracena (Huelva), Val Miñor (Galicia), El Hierro (Canarias) o Tierras de Burgo (Soria) son algunos de los lugares que el leonés visitará en Volando voy, y donde llevará a cabo retos colectivos como máxima novedad de esta cuarta entrega del programa.
“En vez de hacer misiones más puntuales hemos decidido hacer misiones más colectivas, más potentes y de mayor alcance, siempre relacionadas con un problema de actualidad y con una connotación de ayuda real”, explica Calleja (Fresno de la Vega, León, 1965).
La “esencia” del programa, que se emitirá este domingo a las 21.30 horas en Cuatro, es “evitar” esa despoblación rural “masiva”, y poner en valor espectaculares y desconocidos rincones de España de la mano de sus vecinos, que este año tendrán mayor protagonismo.
Así, Calleja y su equipo arrancarán la temporada en Las Hurdes para concienciar sobre la importancia de las abejas y la miel de la zona, y construirán con los habitantes una especia de “hotel de insectos”. En el Parque Natural de Redes recuperarán un camino rural, y en Penelles rehabilitarán un cine para volver a dar vida al pueblo.
Asimismo, en la Sierra de Aracena tratarán de frenar la plaga “la seca”, una de las más dañinas que afectan a las dehesas onubenses, y en Val Miñor repoblarán un bosque en una de las zonas más afectadas de Galicia por los incendios de 2017.
“No sabemos lo que ocurre en los pueblos. No sabemos lo que es ir a los pueblos y que solo quede gente mayor. Es la gente menos retratada en la televisión, en los medios, nadie se ocupa de ellos”, denuncia el aventurero que, entre otros logros, ha coronado el Everest, el Lhotse y el Cho Oyu, y además ha realizado expediciones en el Polo Norte o la Antártida.
Aunque después de todas esas aventuras ahora pone el foco en España con un programa que “deja buena parte a la improvisación”, en el que “no hay nada impostado”, y que produce con su propia productora, Zanskar Producciones.
Calleja afronta “muy feliz” la vuelta de Volando voy, espacio por el que recibió en 2017 el premio “Esteban López Plaza” de Periodismo y Comunicación, concedido por la Fundación de Estudios Rurales. - Efe