BILBAO - Si no fuese por su elevado coste de adquisición y uso, todos los coches llevarían cuatro ruedas motrices. Este sistema garantiza unos niveles de seguridad, control y precisión de movimientos superiores a los que brindan la tracción delantera o la propulsión; sobre todo cuando la climatología o la orografía disminuyen la adherencia de la superficie sobre la que se circula. No obstante, los constantes progresos tecnológicos están propiciando el desarrollo de sistemas 4x4 cada día más eficientes, ligeros y asequibles. Es el caso del 4Motion de Volkswagen, que ya emplean media docena de modelos de la firma.
La del nuevo Golf R es la sexta incorporación a este plantel, en el que figuraban variantes de Phaeton, Passat y Sharan, así como los SUV Tiguan y Touareg. La marca alemana recibió el año pasado 2.350 pedidos de clientes interesados en esta tecnología; un volumen de matriculaciones que supone el 5% del total de vehículos con tracción a las cuatro ruedas vendidos en 2103 en el mercado español.
El objetivo del 4Motion de VW es brindar una solución diferente para cada tipo de usuario. Las necesidades del comprador de una berlina señorial no son idénticas a las de quien adquiere un sedán familiar, un deportivo o un monovolumen; y todas ellas son distintas a lo que espera quien se decanta por un vehículo con clara capacidad off road.
Por ese motivo, los turismos de la casa que instalan motor transversal -Golf, Passat, Tiguan y Sharan- recurren a un embrague Haldex capaz de transmitir casi el 100% del par al eje trasero en caso necesario. Los vehículos en los que el propulsor va anclado longitudinalmente (Phaeton y Touareg) y precisan diferencial central, emplean sistema Torsen, un autoblocante que dosifica la fuerza que llega a cada eje en función de la adherencia disponible. El SUV tope de gama ofrece, además, una segunda alternativa 4XMotion pertrechada con diferencial central libre y caja reductora para superar dificultades más severas: es capaz de avanzar incluso si sólo una de sus ruedas está en contacto con el suelo.
cambia el touareg Texto Volkswagen acaba de desvelar la nueva imagen que lucirá el Touareg a partir de verano. Es una evolución estética y técnica, no una transformación radical. Afecta al semblante (grupos ópticos y parrilla), a la zaga, a la ambientación interior (estrena controles, botones, tapizados, inserciones decorativas, etcétera...) y a la paleta de colores. En el plano técnico retoca la unión al suelo y afina algunos motores. Mantendrá su oferta, dominada por unidades gasóleo TDI V6 y V8.
La de seis cilindros y 3.0 litros propone variantes con 204 y 258 CV. Ambas rebajan sus consumos (6,6 y 6,8 litros) pese a que la segunda gana potencia. La tercera opción sigue siendo la V8 4.0 de 340 CV.
La gama se completa con la propuesta híbrida, que compagina un motor gasolina de seis cilindros (333 CV) con otro eléctrico (52 CV) y promete un gasto medio ideal de 8,2 litros.