A media mañana, concretamente a las once y hasta la una de la tarde, Onda Vasca con Kike Alonso y su equipo. La programación recién estrenada permite una comunicación con los oyentes que se hace aún más grande gracias a las redes sociales.
Abriendo micrófono€ La mano del técnico se alza para decir que ya empieza este tiempo de radio con un nuevo formato. La conexión se abre en ambas direcciones: "Me ha sorprendido la cantidad de mensajes que nos envían al WhatsApp", dice Alonso. Son personas que están trabajando o teletrabajando, estudiando, en la calle, en casa, hombres y mujeres.
Kike describe el programa como"dinámico, con muchas voces, muchísimas ventanas abiertas, pocas secciones fijas, reporteros que nos ofrecen la noticia desde el mismo lugar donde sucede". En definitiva, la inmediatez que define a este medio y en el que Internet facilita la interacción de los escuchantes.
"Salir a la calle con el micrófono de Onda Vasca ha sido un salto cualitativo. Buscamos contenidos que afectan, interesan a la ciudadanía", comenta. "Hemos transformado la programación tratando de hacer una radio del futuro porque estamos potenciando todos los canales que se encuentran al alcance del consumidor: Facebook, Instagram, Twitter, incluso hemos incorporado la imagen a través de la plataforma Twitch, en la que nuestros oyentes pueden ver cómo hacemos la radio en directo", explica. Su objetivo es buscar la información del día y tratar de encontrar el equilibrio entre entretenimiento y noticias. La actualidad marca el ritmo matinal.
En este punto son indispensables los reporteros a pie de calle que desde el lugar de la noticia cuentan qué está pasando. "Estoy descubriendo que mantengo la misma curiosidad que cuando empecé en esto de la radio, y que cada día aprendo cosas nuevas", asegura. "Nuestros oyentes saben que vamos a estar allí donde va a ocurrir algo". Y es que, en Onda Vasca "somos todos un equipo y trabajamos todos. Hemos hecho un todo de la mañana, y desde las 6 que empieza Txema Gutiérrez, hasta la una, la mañana es un continuo. Los oyentes no se pierden nada de lo que ocurre con los dos programas", explica Kike.
Además, los programas se ofrecen a la carta. En cualquier momento se puede escuchar el contenido de los programas, y eso exige estar a la última. Tratar de ofrecer a los oyentes lo que piden. Y tienen en cuenta a los radioyentes jóvenes que quieren estar al día "y nos adaptarnos a su lenguaje". Las redes sociales ayudan a dar ese paso "para rejuvenecer a la audiencia y no tener el prejuicio de que la radio la escuchan solo los mayores. Con el tiempo vamos afinando la orquesta y la sinfonía sonará mejor", concluye este periodista.
Otra novedad son los informativos: "Hemos transgredido las normas tradicionales de respetar las horas en punto". Ya no hay una línea que divida radicalmente cada hora. "Podemos irnos mas allá del tiempo. La información va a estar ahí, sea a en punto o dos minutos más tarde. Si estamos en una entrevista y suenan las señales horarias y el tema es interesante, seguimos con ella. La información sigue ahí", apunta Kike.
Las colaboraciones aportan otros matices, como la nutricionista Miren Marín, El musicalizador Bixen Aranburu, recomendaciones de cine, etc. En definitiva, planes de ocio para el fin de semana, dentro de la situación que vivimos. Otra nota de color son los concursos que llaman a los oyentes a participar: "No se lo ponemos difícil a los oyentes con las preguntas" y pueden ganar un lote de productos de diferentes tipos. "Simplemente queremos que participen", es claro.
Así son las mañanas de Onda Vasca con Kike Alonso y su equipo, una radio cercana "que te mantiene pegado al suelo" con la noticia en directo y distracción.
