Por fin en casa. Nunca se hubieran imaginado que volver a Vitoria, a casa y a la rutina fueran motivos de tanta alegría.

Los pasajeros a los que Ryanair dejó tirados en Mallorca el pasado lunes 23 de septiembre han podido regresar por fin a la capital alavesa.

Eso sí, con todos los papeles y documentación preparados para interponer reclamaciones y denuncias contra la aerolínea de bajo coste.

Tal y como han explicado a DNA a su llegada a Foronda, "se han sentido estafados y, sobre todo, ninguneados por la compañía".

Todo comenzó el mismo día de regreso de sus vacaciones en Mallorca cuando recibieron un mensaje de la compañía.

"Apenas faltaban tres horas para el despegue del avión, y Ryanair nos comunica que el vuelo se cancela".

No se lo podían creer. El motivo: inclemencias meteorológicas. "No nos parecía seria ni real la explicación cuando en el aeropuerto de Mallorca en ese mismo momento cientos de aviones estaban aterrizando y despegando con el cielo despejado".

Ante el monumental enfado de decenas de pasajeros que necesitaban volver a Vitoria ese lunes, desde la compañía les propusieron dos soluciones:

O regresar en un vuelo directo de Ryanair a Vitoria a los dos días, el miércoles 25 de septiembre. O el reembolso del vuelo.

"Estafados y ninguneados"

En ese momento, ante la oficina de Ryanair en el aeropuerto de Mallorca, decenas de pasajeros se sentían "estafados y ninguneados".

"No nos daban explicaciones de ningún tipo, y no se hacían cargo ni se preocupaban de cómo íbamos a pasar los dos siguientes días en Mallorca", explican pasajeros de Vitoria afectados por la cancelación inesperada.

"Ni siquiera nos dieron la opción de buscarnos un hotel hasta el próximo vuelo, no se preocuparon en ningún momento".

Los que optaron por regresar a los dos días, antes miraron otras opciones para intentar volver a Vitoria ese mismo lunes, pero "todos los vuelos eran muy caros, con precios y costes inasumibles".

Reclamaciones, quejas y denuncias

También solicitaron interponer quejas y denuncias, y desde la compañía solo les remitieron a la página web para poner una reclamación online.

"Además de exigirle a Ryanair todos los gastos que tuvimos que asumir tras la cancelación del vuelo, hemos empezado a tramitar la documentación para que la denuncia conste ante el Gobierno Vasco y en Consumo".

Los pasajeros afectados el lunes 23 de septiembre pertenecen a dos rutas canceladas: de Mallorca a Vitoria a las cuatro y media de la tarde, y como consecuencia, los pasajeros que tres horas más tarde hacían el recorrido inverso (de la capital alavesa a la isla) tampoco salieron porque el avión no llegó, no había despegado de Mallorca.

Dos días más en Mallorca ha supuesto buscarse un apartamento "porque el precio de los hoteles es prohibitivo", volver a coger un coche de alquiler, todos los cambios en sus trabajos,... Una odisea que no esperaban protagonizar.