Como a todos y todas nos sonará, Euskadi ha sido uno de los lugares protagonistas para dar vida a muchos de los escenarios de la aclamada serie Juego de Tronos. Por esto mismo, en esta experiencia les ofrecemos una ruta por los más impresionantes como los acantilados de un peculiar flysch con una historia superior a 60 millones de años, una playa salvaje protegida por barrancos de gran belleza o un mágico islote que fue escenario de piratas, akelarres y numerosas leyendas.

Rodeada por acantilados de gran belleza

Ubicada a diez minutos del casco urbano de Barrika, la playa de Muriola, también conocida como La Cantera, se encuentra protegida por acantilados de gran belleza. Este enclave de reducidas dimensiones se encuentra compuesto por arena y rocas, además de que carece de servicios.

Su acceso consta de un camino desde el aparcamiento, situado cerca de la rotonda que se encuentra a la entrada de la localidad. Sin duda, se trata del lugar perfecto para aquellos que busquen un ambiente tranquilo, y para aquellos que sean amantes del submarinismo.

Vistas de la playa de Muriola. Diego Artola

Un fenómeno geológico sin precedentes

Perfecta, no solo por su belleza, sino por la tranquilidad de una playa que se aleja del habitual ajetreo de la Concha o la costa de Zarautz, la playa de Itzurun, en Zumaia, es otro de los lugares que hay que visitar sin excepción. Rodeada por enormes acantilados verticales, un fenómeno geológico conocido como flysch y provocado durante miles de años por el impacto constante del mar contra la roca, llamó la atención de la plataforma de streaming HBO.

Por lo tanto, y a partir de 2017, la playa de Itzurun acabó convirtiéndose en la costa de Rocadragón. Y es que no es la primera vez que se avistan caravanas de gente, vestidas de personajes de la serie, que forman parte de los numerosos tours turísticos que recorren aquellos escenarios de Euskadi en los que se filmó esta adaptación de las novelas de George R.R. Martin.

Rocadragón

Perteneciente a la costera localidad vizcaina de Bermeo, San Juan de Gaztelugatxe no solo es uno de los paisajes más espectaculares de nuestro territorio, sino que también es Rocadragón, el castillo de la protagonista Daenerys Targaryen. Escenarios de piratas, akelarres y leyendas en la vida real, los 241 escalones de San Juan de Gaztelugatxe nos conducen hacia su final, donde podremos posar nuestro pie sobre la huella que según dicen, dejó allí San Juan Bautista.

En lo alto, la pintoresca ermita y las espectaculares vistas al bravo mar Cantábrico que ha tallado en la isla acantilados, túneles y arcos imposibles nos recuerda la belleza salvaje de la naturaleza, y la suerte que tenemos de poder contemplarla.

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Vistas de San Juan de Gaztelugatxe. Imanol Fradua

En definitiva, Euskadi conserva verdaderas joyas escondidas en las profundidades de sus entrañas que nos recuerdan la importancia de respetarlas y de cuidarlas para su correcta conservación en un futuro. Quizá no veamos dragones, pero sí que vemos lugares donde la realidad supera con creces a la ficción.